Después de cuatro años desde el inicio del caso de la maestra Guadalupe Barajas Piña, los sujetos señalados como posibles responsables fueron puestos en libertad, supuestamente por falta de pruebas.
Según argumentó la jueza, su fallo se debió a la falta de elementos que le permitieran dictar una sentencia condenatoria contra los acusados. Sin embargo, esta decisión consternó a los familiares de Guadalupe y a los colectivos que exigieron justicia.
Guadalupe Barajas desapareció en febrero de 2020 en la ciudad de Salvatierra, después de haber acudido a un curso de capacitación.
Cabe mencionar que los familiares y amigos de Lupita denunciaron que desde un inicio hubo negligencia por parte de la Fiscalía General del Estado. A pesar de las denuncias, las respuestas fueron tardías, lo que complicó la localización de la docente.
No fue hasta varios meses después que el cuerpo de Guadalupe fue encontrado en una fosa clandestina en la misma ciudad donde ocurrió su desaparición, lo que generó una gran polémica en torno al mal manejo del caso por parte de las autoridades.
En 2022, un individuo apodado ‘La Gringa’ fue señalado como el presunto secuestrador y asesino de la profesora. Sin embargo, su detención no representó una resolución para algunos ciudadanos que aseguraron que el caso estaba muy lejos de esclarecerse.
Los familiares, apoyados por colectivos, denunciaron que desde un principio el caso de Guadalupe presentó graves irregularidades, además de la falta de voluntad política para su esclarecimiento.
Colectivos de derechos humanos y organizaciones sociales condenaron la decisión judicial que otorgó la libertad a los cuatro sujetos señalados como responsables de los delitos de secuestro y asesinato de Guadalupe Barajas.
Consideran que la resolución de la jueza marca un grave retroceso en la búsqueda de justicia para las víctimas y sus familiares.
