En la zona centro de Salamanca, para ser más precisos en la calle Morelos, esquina con Sánchez Torrado, se encuentra la fachada de una propiedad antigua en riesgo colapso.

Debido al peligro que representa la caída de esta barda perimetral, es que las autoridades de Protección Civil de Salamanca, han colocado cinta perimetral el color amarillo con la leyenda «Precaución», en la fachada de este domicilio, la propiedad lamentablemente desde hace años ha presentado un grave deterioro en su estructura, esto principalmente debido a la falta de mantenimiento, las recientes lluvias agravaron la situación y vecinos alertaron sobre el posible colapso de este revestimiento.

Este inmueble no solo tiene valor arquitectónico, sino también histórico y cultural para la comunidad salmantina, fue construido en el siglo XIX y forma parte del patrimonio del Centro Histórico de Salamanca

Al cuestionarle a Dinorath Lastiri directora de Protección Civil de Salamanca, respecto a este hecho, respondió: «Así es, esa fachada está muy dañada y deteriorada por el tiempo, se está viendo con el INAH para que se permita su demolición, ahorita con las lluvias, se deteriora más».

Las acciones futuras se encuentran siendo evaluadas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el cual se encuentra involucrado en la evaluación y decisión sobre si es viable una restauración o debe ser demolida la citada fachada, con la finalidad de no poner en riesgo a la población salmantina, por lo que se ha solicitado a la sociedad al momento de pasar por la zona realizarlo con mucha precaución.

Por su parte, el Cronista de Salamanca, Jaime Martínez, explicó la importancia que tiene esta edificación en la historia y cultura de Salamanca: «En Semana Santa ahí llegaban a hospedarse los viajeros o los vendedores de las artesanías, en la parte de atrás había un viejo pozo que luego fue tapado, en esa propiedad vivió un sacerdote por un tiempo, a quien se le acusó de tener una relación con una mujer. Obviamente en forma secreta, pero un día sufrió un castigo, ya que con la mujer que dormía, un día amaneció muerta. Dicen que con unas herraduras en las manos y un bozal en la boca, por eso ahí decían que se aparecía la mula Herrada».