La mañana del lunes 4 de noviembre, el Jardín Constitución de Salamanca amaneció cubierto de basura tras las celebraciones del Día de Muertos, lo que provocó que personal de Servicios Públicos Municipales emprendiera una limpieza exhaustiva. La cantidad de desechos, que incluía cajas de cartón, envolturas, bolsas y botellas de plástico, ha generado malestar entre los ciudadanos, quienes exigen que tanto los comerciantes como los visitantes asuman la responsabilidad de mantener limpio este espacio público.

Residentes locales expresaron su descontento, considerando inaceptable el estado en que quedó el lugar tras los festejos. Lila, una salmantina, sugirió que las autoridades deben ser más estrictas con los permisos de los comerciantes: “Deberían imponer un ultimátum: o limpian, o no obtienen permisos. Hasta las mantas estaban en condiciones deplorables. Exijan que traigan mantas blancas y limpias para dar una mejor imagen”.

Si bien los ciudadanos reconocen que eventos de esta magnitud generan residuos, también señalan que cada participante debe hacerse responsable de su basura. Luz María enfatizó que los comerciantes deben recoger su mercancía sobrante y desechos, mientras que la señora Leticia señaló la importancia de la educación cívica de los asistentes: “Es increíble ver a personas con tan poca cultura. Estuvimos en el jardín y nos llevamos nuestra basura. Enseñé a mi nieta a recoger más”.

Ante esta situación, los ciudadanos piden a las autoridades municipales que implementen sanciones más estrictas para quienes no respeten los espacios públicos, advirtiendo que, de no tomarse medidas, la problemática seguirá afectando la imagen del centro de Salamanca tras cada evento.