Todas las personas que crecieron en los años 80’s recordarán que entonces se tenía una de las costumbres religiosas más memorables para todos los niños y es que el Sábado de Gloria era celebrado con cubetadas, manguerazos o globos que contenían agua, con el único objetivo de mojarse por completo mientras corrían para no ser alcanzados.
Esta celebración perduró durante mucho tiempo y se tenía la creencia de que como manera de purificación, los ciudadanos se lanzaban cubetadas de agua el día sábado para celebrar además la víspera de la resurrección de Jesús.
Sin embargo, actualmente, la crisis hídrica no permite a las nuevas generaciones disfrutar de esta costumbre, pues no existe el agua suficiente para sacear las necesidades básicas de algunas comunidades o incluso ciudades, motivo por el cual, las autoridades no solo a nivel local o estatal, sino a nivel nacional, piden a la ciudadanía no llevar a cabo esta actividad y evitar de cualquier manera el desperdicio de agua, a esta petición se sumaron algunas asociaciones quienes alertan sobre el terrible estado de sequía que se está padeciendo actualmente.
Por otro lado, el Gobierno Municipal de Salamanca pide a la población que en caso de ser testigos de que alguien esté realizando esta actividad o bien, que se encuentre desperdiciando el agua, lo denuncien directamente para poder sancionar a los responsables.
De acuerdo con el Artículo 10 de la Ley de Derecho al Acceso, Disposición y Saneamiento del Agua, las personas que desperdicien el agua son acreedores a multas que van desde las 100, hasta las 300 Unidades de Medida y Actualicación, es decir, entre 1058.41 pesos y 3 mil 848.80.