El Grupo San Felipe de Jesús ha realizado con gran éxito como es costumbre desde hace alrededor de 20 años la realista representación del viacrucis viviente, esta actuación logra reunir a decenas de salmantinos quienes se unen a la pena que sufrió Jesús de Nazaret ante los castigos por parte de soldados romanos.
Esta interpretación tiene como inicio y final la Plaza Cívica Miguel Hidalgo, teniendo como escenario las calles del centro histórico, la forma tradicional de realizar esta actuación consta de catorce estaciones, las cuales son las siguientes: Jesús es condenado a muerte, Jesús carga con la Cruz, Jesús cae por primera vez, Jesús encuentra a María, su Santísima Madre, Simón de Cirene ayuda a llevar la Cruz de Jesús, Verónica limpia el rostro de Jesús, Jesús cae por segunda vez, Jesús consuela a las mujeres de Jerusalén, Jesús cae por tercera vez, Jesús es despojado de sus vestiduras, Jesús es clavado en la Cruz, Jesús muere en la Cruz, Jesús es bajado de la cruz y puesto en brazos de su Madre, Jesús es sepultado.
«Lupe» Molina, el intérprete de Jesús de Nazaret, cuenta con 11 años de experiencia realizando el papel, este año tiene un motivo muy especial para escenificarlo, pues pidió por la salud de su madre, la cual se encuentra actualmente enferma.
Como cada año el desgaste por parte del actor que representa a Jesús de Nazaret es admirable, cabe puntualizar que para poder realizar este papel se debe de preparar desde meses antes, pues el verse expuesto a una temperatura superior a los 30 °C, recibir azotes por alrededor de 10 verdugos y cargar por las calles del Centro Histórico una cruz con un peso superior a los 80 kilogramos.
La Semana Santa son días para hacer una pausa en la vida, tener un espacio para reflexionar, para estar con la familia y vivir un momento de encuentro con Dios.
