En un período de 24 horas, el estado de Guanajuato fue escenario de cuatro masacres que dejaron un saldo de 14 muertos y 7 personas lesionadas. Dos de estas balaceras ocurrieron en la noche del sábado, una en un funeral en San Miguel de Allende y otra en una gasolinera en Juventino Rosas.
En San Miguel de Allende, un grupo armado atacó a un grupo de personas que velaban a un adulto mayor en una vivienda de la calle Principal, en la comunidad de Bocas. Tres personas murieron y cinco resultaron heridas, incluyendo una mujer y un niño de 10 años.
En la gasolinera de Juventino Rosas, dos clientes y una empleada fueron acribillados y muertos. Un grupo delictivo también disparó contra un hombre y un adolescente que platicaban afuera de un negocio, hiriendo de muerte a la empleada.
Además, en la colonia Juárez de Irapuato, cuatro personas fueron asesinadas y un menor resultó herido durante una posada. Los agresores ingresaron a la vivienda y dispararon contra los asistentes.
La primera masacre del fin de semana ocurrió en el camino que va a la comunidad El Perico, en el municipio de Valle de Santiago, donde cuatro hombres fueron asesinados y otro resultó herido en una emboscada.