En San Miguel de Allende, el dolor se convirtió en valor: los habitantes se organizan otra vez, con paso firme y corazón encendido, para exigir justicia y que vuelva la paz que tanto anhelan.
La cita es el sábado 30 de agosto a las 18:00 horas. Una caminata desde la calle del Cardo hasta la antigua presidencia. Será la tercera movilización desde el trágico ataque del 17 de agosto, y esta vez la convocatoria pide algo simbólico pero potente: vestir de blanco o negro, para honrar a quienes ya no están y para apostar por un futuro con dignidad y sin miedo.
El mensaje que une a quienes marchan es claro y lleno de determinación:
“Exigimos justicia, paz y que las autoridades cumplan con su trabajo de que San Miguel de Allende sea seguro para todos… San Miguel no puede ser más rehén de la delincuencia, el miedo y la injusticia».
Este dolor colectivo ya ha dado paso a la acción: hace unos días ya se realizaron dos marchas de paz, con cientos de personas exigiendo lo justo. Solo en esa primera movilización hubo tres hombres muertos (uno menor de edad) y 18 personas lesionadas, de las cuales una aún está hospitalizada en Celaya.
La violencia ha seguido su embate: un hombre resultó herido en la colonia Olimpo, y otro incidente dejó a una mujer lesionada en el Ejido de Tirado el pasado 25 de agosto.



































