
El Congreso del Estado de Guanajuato vivió una jornada histórica este jueves, al discutir durante más de cinco horas la despenalización del aborto. Sin embargo, tras un intenso debate, la iniciativa quedó en un empate técnico: 18 votos a favor y 18 en contra, lo que impidió su aprobación. La discusión será retomada el próximo jueves 5 de junio.
Desde las 10:15 de la mañana, diputadas y diputados abordaron cinco dictámenes relacionados con los derechos sexuales y reproductivos. Tres de ellos fueron desechados, y el cuarto —que proponía eliminar el delito de aborto del Código Penal estatal— fue el que generó el empate que mantiene el tema en suspenso.
En tribuna, legisladores de Morena, Movimiento Ciudadano, Partido Verde y PT defendieron la reforma como un paso necesario para garantizar los derechos de las mujeres y alinearse con los criterios de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, que ha declarado inconstitucional penalizar el aborto. “En Guanajuato se abren más carpetas de investigación por abortar que por feminicidio”, señaló el diputado Abraham Ramos, de Morena, al denunciar lo que calificó como una criminalización sistemática.
Afuera del Congreso, el ambiente fue igual de tenso. Colectivos feministas exigieron la aprobación de la reforma, mientras grupos provida también se manifestaron para rechazarla. Las consignas y pancartas de ambos lados reflejaron la profunda división social que existe en torno al tema.
Actualmente, Guanajuato es uno de los pocos estados que aún penaliza el aborto, incluso en casos de interrupción voluntaria del embarazo dentro del primer trimestre. Organizaciones feministas han advertido que la entidad podría estar incurriendo en desacato al no armonizar su legislación con el marco constitucional vigente.
La nueva votación del 5 de junio podría cambiar el rumbo del debate. En tanto, activistas y legisladores a favor de la despenalización han hecho un llamado a la ciudadanía a mantenerse alerta y seguir presionando para que el Congreso garantice el derecho a decidir.