Guanajuato enfrenta los efectos de la canícula, con temperaturas elevadas y una reducción notable en las lluvias en gran parte de los 46 municipios. En zonas como Jaral del Progreso se han alcanzado los 33°C, mientras que León, Irapuato, Guanajuato capital y Xichú registran temperaturas de 32°C.
Hasta el 26 de julio, el promedio estatal de lluvia acumulada es de 395 mm, superando el total registrado hasta el 31 de julio del año pasado, que fue de 348 mm. En el caso de León, el acumulado ya es de 443 mm.
Aunque se prevé una disminución general de precipitaciones, se esperan lluvias moderadas en algunos municipios del sur, como Acámbaro y Salvatierra, debido a la combinación de una onda tropical activa, una vaguada y la humedad proveniente del Océano Pacífico y el Golfo de México.
La canícula, caracterizada por el aumento de temperatura y una baja en las lluvias, se presenta especialmente en las zonas urbanas del corredor industrial, donde la concentración de calor y contaminantes es mayor.
Por otra parte, las lluvias registradas desde mayo han favorecido el nivel de las presas en la entidad, que actualmente se encuentran en un promedio de almacenamiento del 71.6%. El acumulado de precipitaciones desde el inicio de la temporada alcanza los 344.5 mm.
Sin embargo, a pesar del buen panorama para el presente ciclo agrícola, persiste la preocupación por la falta de mantenimiento en la infraestructura hidráulica, lo que podría afectar la captación de agua en el futuro si no se toman medidas preventivas.




































