Las recientes precipitaciones en Guanajuato han traído efectos positivos tanto para el medio ambiente como para los habitantes del Estado.
Durante junio, las lluvias constantes han permitido la recuperación del nivel de las presas y han contribuido a que la temperatura promedio descienda a 21.1°C, incluso por debajo de los 23.5°C registrados en mayo, según el último informe del Servicio Meteorológico Nacional.
Este alivio climático se produce tras dos años de temperaturas elevadas que agravaron los efectos de la sequía. En junio de 2023, Guanajuato alcanzó una media de 24.9°C, mientras que en 2024 el calor fue aún más intenso con un promedio de 28°C y una máxima de 34.4°C.
Aunque junio fue el segundo mes más caluroso del año, con una máxima de 26.8°C, estuvo por debajo de los picos registrados entre febrero y mayo, que superaron los 27°C y llegaron hasta 31.8°C en abril.
Hasta junio, se han registrado 260.2 mm de lluvia en el estado, con 177.1 mm solo en ese mes. Se espera que julio mantenga esta tendencia, ayudando no solo al ambiente, sino también a la percepción térmica que ha dado un respiro a los guanajuatenses.




































