
Hace 16 años, el país quedó marcado por una tragedia que jamás será olvidada.
El incendio en la Guardería ABC de Hermosillo, Sonora, el 5 de junio de 2009, cobró la vida de 49 niños y dejó una herida imborrable en las familias afectadas. Sin embargo, entre el caos y el humo, hubo un hombre que no dudó en desafiar las llamas para salvar vidas, Héctor Gutiérrez, un quiropráctico que, guiado por la urgencia del momento, rescató a 17 bebés atrapados en el fuego.
Por años, Héctor mantuvo un perfil discreto, sin buscar reconocimiento por su valentía. Pero el destino tenía reservado un momento especial para él, en el aniversario número 16 de la tragedia, los jóvenes que alguna vez fueron bebés rescatados por sus manos quisieron reunirse con el hombre que les dio una segunda oportunidad.
El emotivo encuentro tuvo lugar en Hermosillo, donde los sobrevivientes, hoy adolescentes, pudieron mirarlo a los ojos y agradecerle personalmente.
Más allá de ser un homenaje a la valentía de Héctor, el reencuentro sirvió como recordatorio de la lucha que aún sigue vigente, la exigencia de justicia para las víctimas y la necesidad de reforzar la seguridad en las guarderías del país.
Las familias de los niños fallecidos continúan organizando marchas y movilizaciones en memoria de sus pequeños, buscando que la tragedia de la Guardería ABC no quede en el olvido y, sobre todo, que nunca vuelva a repetirse.
Entre emociones encontradas, Héctor, con su humildad intacta, expresó que solo hizo lo que debía en ese momento. «No soy un héroe, solo hice lo que cualquiera hubiera hecho al ver a esos niños en peligro», dijo conmovido.