
La violencia que azotó la colonia Barrio Nuevo dejó una imagen que conmovió a toda la ciudad: un bebé de un año, herido y cubierto de sangre, mientras su madre yacía sin vida tras intentar protegerlo de las balas.
De acuerdo con lo compartido por el Periódico AM, Carmen Garibaldi fue una de las once personas asesinadas en el ataque armado. Según relató su hermano Maurilio, ella estaba sentada junto a su pequeño Teodoro en la entrada de la casa de sus padres cuando comenzaron los disparos. El lugar, donde se encontraban la mayoría de las víctimas, quedó convertido en un escenario de pánico y confusión.
Entre el tumulto y el miedo, Maurilio logró subir a su hermana a un vehículo con la esperanza de salvarla. Carmen falleció al llegar al hospital, alcanzada por múltiples impactos de arma de fuego.
El pequeño Teodoro, al que ella intentó proteger con su cuerpo, sufrió dos lesiones en la ingle y la cintura, además de un disparo que le arrebató el ojo izquierdo.
La masacre también dejó varios heridos, como Norma Cristina, quien recibió un balazo en una pierna, y su hija Milly, de siete años, reportada en estado grave. Ambas son familiares de Cristina, identificada como líder de la Banda San Cristóbal.
Maurilio contó que, junto con otros 25 familiares que radican en Chicago, habían regresado a Irapuato después de un año sin visitar la ciudad. Se hospedaron en varias casas de la calle Bustamante, donde ocurrió el ataque.
Hoy, la familia se prepara para enterrar a sus muertos y volver a Estados Unidos. El miedo, admiten, hace que regresar a Irapuato sea una posibilidad cada vez más distante.