
Un nuevo acto de vandalismo ha generado indignación en el centro histórico de Michoacán, luego de que un sujeto pintara un grafiti de casi cuatro metros cuadrados sobre uno de los muros de la Catedral, uno de los monumentos más representativos del estado.
El hecho ocurrió recientemente y fue detectado por ciudadanos que transitaban por la zona, quienes reportaron la presencia de la enorme pintada sobre la estructura de cantera, símbolo del patrimonio cultural e histórico de la región.
Autoridades locales confirmaron que ya se inició una investigación para identificar al responsable. También hicieron un llamado a la ciudadanía para que, en caso de contar con información, colaboren para ubicar al autor del delito.
Organismos dedicados a la conservación del patrimonio calificaron el acto como una agresión directa contra la identidad histórica de Michoacán, y exigieron medidas más estrictas para proteger los sitios emblemáticos del estado. En tanto, personal especializado analiza la manera de remover el grafiti sin dañar la piedra original.
Este hecho no solo ha despertado molestia entre habitantes y visitantes, sino que también ha reavivado la discusión sobre la necesidad urgente de reforzar la seguridad en zonas históricas y turísticas de Michoacán.