El Senado de la República aprobó con 76 votos a favor y 39 en contra una reforma a la Ley de Amparo, el recurso legal que permite a cualquier persona defenderse si una autoridad comete injusticias o viola sus derechos.
La reforma cambia dos aspectos principales:
1.Demostrar afectación real:
Ahora, para presentar un amparo será obligatorio probar que existe un daño verdadero, ya sea individual o colectivo. Esto busca evitar demandas sin fundamento y agilizar el trabajo de los tribunales.
2.Límites a la suspensión:
Aunque seguirá existiendo la posibilidad de suspender las acciones del gobierno mientras se resuelve el juicio, habrá excepciones. La suspensión no aplicará si el caso está relacionado con lavado de dinero, terrorismo, actividades sin permiso o deuda pública.
Durante la discusión, la oposición advirtió que estos cambios podrían dificultar la protección de los ciudadanos, mientras que los legisladores de Morena aseguraron que la reforma fortalece el amparo y evita su mal uso.
El dictamen aprobado en lo general pasará ahora a su revisión en lo particular antes de ser publicado y entrar en vigor.



































