La calle Sol, al sur de Salamanca, sobre todo a la altura de la colonia El Cerrito, es escenario de diversas acciones que afectan el día a día en Salamanca. La irrupción de la ciclovía, arrancones, vehículos que circulan a exceso de velocidad y que muchos depositan basura en diversas áreas, son algunos de los casos que los residentes circundantes reportan y a los que se suma uno: la invasión del camellón por parte de camiones de ladrillo.
El escenario es añejo, la denuncia también; y a pesar de los esfuerzos de los colonos por recuperar el espacio y que el camellón luzca como debería: un área verde vívida y digna de ser una postal, sus peticiones, las que han sido reiterativas, no han sido escuchadas, a nadie parece importarle la ausencia de educación vial, que se atente contra la imagen del municipio y que no se dejen despejadas las zonas que solo debieran ser cubiertas por pasto, flora y árboles.
Según los quejosos, estos camiones prácticamente se han adueñado del camellón, lo que ha provocado que luzca desprolijo y descuidado; dejando de lado lo verdoso que el paisaje debería proyectar o al menos en donde debería verse la intención de repararlo y atenderlo, tal como expresa un afectado: “Al menos tepetate le deberían echar, son más o menos unos 100 metros de área verde que ya está toda destruida y a nadie le importa”.
Lo anterior refleja la ausencia de atención de las autoridades y el olvido que en la zona sur ha sido una constante desde hace años pues con luego de la presencia de estas grandes unidades que transportan ladrillo, se ha acrecentado el problema y este camellón carece, forma absoluta, de lo mínimo para llamarla área verde, un panorama desolador que urge atención del gobierno municipal, aunque, como desde hace años, tal parece que este no llega.


































