Aunque el gobierno municipal difundió un mensaje destacando el “respaldo” del presidente César Prieto a la Segunda Sesión Ordinaria del Consejo Directivo del Instituto Municipal de Salamanca para las Mujeres, (donde es también presidente), el alcalde no estuvo presente en el encuentro, pese a que Salamanca se encuentra bajo alerta de género.
El evento, realizado esta semana, fue encabezado por funcionarias del instituto y regidoras municipales, quienes tomaron protesta a Marisela Ortiz Matus como nueva integrante del Consejo Directivo para el periodo 2024–2027.
El comunicado oficial presume el “respaldo del presidente”, aunque —de acuerdo con registros— César Prieto no ha asistido a ninguna de las sesiones de este órgano durante la actual administración ni de la pasada.
La falta de presencia del alcalde ha generado críticas entre diversos sectores, quienes cuestionan el verdadero compromiso institucional con la agenda de género en un municipio que enfrenta altos índices de violencia contra las mujeres.
A esta situación se suma el hecho de que al menos una integrante del consejo es familiar del presidente municipal, lo que ha despertado dudas sobre la independencia, representatividad y legitimidad del órgano encargado de impulsar políticas públicas en favor de las mujeres salmantinas.
Otro de los señalamientos recurrentes es la ausencia de activistas, colectivos feministas o representantes de organizaciones civiles en un espacio que, por ley, debería garantizar una participación amplia y plural.
Salamanca es uno de los municipios de Guanajuato con alerta de violencia de género activa, lo que implica obligaciones reforzadas para las autoridades locales en materia de prevención, atención y erradicación de la violencia contra las mujeres.
La distancia del alcalde respecto a este tema central contrasta con el discurso institucional de “compromiso” difundido en redes oficiales


































