Ante los cambios bruscos de temperatura que se han registrado en algunas regiones del país, especialistas recomendaron a la población extremar cuidados para evitar la parálisis facial.
Dicho padecimiento es considerado una emergencia médica y debe tratarse de inmediato para evitar asimetrías en el rostro y afectación en otros órganos como la vista, en donde pueden ocurrir ulceraciones o daño ocular.
Entre más pronto se atienda y revierta, más posibilidades habrá de una recuperación total.
El especialista en rehabilitación Saúl Segovia López, exhortó a atender las infecciones virales, padecimientos de los oídos y evitar cambios bruscos de temperatura, afecciones que estimulan este mal y en general a extremar cuidado sobre todo en quienes padecen enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión y lupus.
Explica que los cambios súbitos de temperatura afectan las pequeñas arterias del nervio facial, que al pasar de un sitio cálido a uno frío o viceversa, se cierran y ocasionan la pérdida o deterioro de su función.
Este problema de salud se percibe en un inicio para masticar y articular palabras, seguido de escurrimiento de líquidos por la boca; el avance es paulatino, de tres a cinco días, hasta llegar a la parálisis de la mitad de la cara.
En este trance se presenta además sensación de hormigueo, adormecimiento y malestar a la mitad de la cara.
Segovia López destaca que el 35 por ciento de los casos son leves y sanan de una a tres semanas, con tratamiento especializado y el programa de terapia física; los moderados llevan de uno a tres meses y los delicados hasta cuatro meses.