El asesinato de cuatro menores de edad, al ser atropelladas por otro joven de 17 años en estado de ebriedad, derivó en una protesta de centenares de ciudadanos que realizaron desmanes en el domicilio particular de la presidenta municipal del PAN, Ana Bueno. Ahora, se ha vinculado a 18 hombres y dos mujeres por terrorismo y daños en propiedad privada.

De todo lo ocurrido, el joven responsable del asesinato sigue sin ser localizado, mientras que los acusados de los disturbios ya han sido vinculados a proceso, con un plazo de dos meses para integrar pruebas.

Arturo Cortés, quien es abogado de uno de los jóvenes encarcelados y recientemente vinculados a proceso por terrorismo, dio cuenta de las inconsistencias del caso, además de las incongruencias que fueron integradas como prueba dentro de la carpeta de investigación.

A decir del defensor, sólo los dichos de los policías estatales presentes en los hechos, son los que se han usado como base de la acusación.

No obstante, el litigante explicó que requieren de la conciliación para que los jóvenes salgan libres, pues interponer un amparo alargaría la estancia de los 18 jóvenes en prisión preventiva, y de las dos mujeres que ya han sido trasladadas al penal estatal en el municipio de Valle de Santiago.

Los dichos

Arturo Cortés es parte de un grupo de abogados litigantes, completado por Alejandro Rivera, Rocío Medina García y Cristian Pineda, todos integrantes del despacho jurídico RiverEli. Ellos tienen un solo defendido, pero lo que hagan por él beneficia todos los muchachos. Todos están en la misma situación jurídica; se les acusa de terrorismo y daños en propiedad privada.

El día de la protesta, elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado detuvieron a 23 personas. Sin embargo tres debieron ser liberados por falta de consistencia en las primeras pruebas.

“Cuando ya en una hora donde los hechos habían transcurrido, se hicieron las detenciones, esto nos da por lógica y por sentido común, que no puede estar una persona en dos lugares a la vez; me puedo ir de uno por uno, comentando las irregularidades que nosotros como defensores percibimos, pero aquí lo más importante y lo que apremia es la situación de jóvenes inocentes”.

Las edades de los cueramarenses va de los 18 a los 45 años.

Fue en la segunda audiencia en la que se presentaron los cargos con base testimonios de los agentes estatales, en los que se señaló a los detenidos como responsables de terrorismo. La defensa respondió presentando videos, y declaraciones que indicaron que estos no se encontraban en el lugar y momento de la protesta.

“Los vinculan a proceso. Siguen en prisión preventiva, aunque no los han bajado a población (…) esto, mientras se desahogan las pruebas suficientes, en lo que pudiera haber una reanudación de juicio, pues se van a mantener en prisión preventiva oficiosa”.

Dados los tiempos, los abogados pretenden buscar el acercamiento con el gobierno municipal que encabeza Ana Bueno. La intención es informarle de la situación general, con base a documentos, por lo que plantearán una conciliación o un punto a favor de los detenidos.

En base a las entrevistas de los policías municipales, las detenciones empezaron desde las 6:55 pm. De las 5:35 hasta las 6:50, llegó el apoyo por parte de elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado (FSPE), quienes empezaron a hacer la retención de la gente.

“Las detenciones se hicieron fuera de tiempo. Ya no fue en flagrancia. No fue en el momento de los hechos, en los que supuestamente dañaron, tanto en la casa de la alcaldesa como presidencia municipal y  la casa del presunto responsable del asesinato (…) Se acusa que hubo quien lanzara bombas Molotov… como ustedes pueden ver, la presidencia no tiene absolutamente nada”.

Todo parece indicar, advirtió el abogado, que para las declaraciones de algunos de los oficiales, se basaron en un machote.

“Hay una cronología documentada de uno de los de los detenidos, que sale de trabajar a las 7 de la tarde y en esta cronología en vídeo y testimonial, él hace un recorrido por algunas calles conocidas de Cuerámaro, llega al centro a un conocido puesto de hamburguesas, y pues quiero pensar que por observar -muchas veces se malinterpreta-, como te ven te tratan, y lo detuvieron”.

“No se puede estar en dos lugares a la vez”, reafirma el defensor.

Pese a la injusticia que quedaría cristalizada, el abogado puntualizó que lo mejor es llegar a un acuerdo, quizá “el perdón” para los detenidos.

“Porque si ellos otorgan de alguna manera el perdón, pues esto nos ayuda a nosotros como defensa a buscar ya la solución jurídica correspondiente”.

Al final, recalcó que el objetivo próximo es se les pueda otorgar la libertad, lo más pronto posible. Aunque se dice consciente de que se ha hecho el trabajo como debe ser. “Pero ya muchas de las veces, o en este caso en particular, pues ya prácticamente la situación tiene que estar o está en manos de la autoridad… Son ellos los que deciden”.

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