#POPLABMX Bajo el amparo del gobierno del Estado, el gobierno municipal de Guanajuato y el Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Simapag), el diputado panista, Sergio Fernando Ascencio Barba, atenta contra uno de los pocos “pulmones” de la capital del estado: la Sierra de Santa Rosa.
Por: Carmen Pizano/ PopLabMx Fotografías/ Juan José Plascencia
El desarrollo inmobiliario de la empresa Loma de Irapuato, cuyo único administrador es el legislador panista representante del distrito 15, no solo ha provocado una indiscriminada tala de árboles, también ha desencadenado un conflicto social por la resistencia de los habitantes a proporcionar agua potable de la Presa del Peralillo para los fines comerciales del empresario.
Sin hacer algún tipo de trámite ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el empresario y político irapuatense inició con el proyecto de construir un hotel en la Sierra de Santa Rosa, pero meses después decidió cambiar a un fraccionamiento residencial, pues le parecía más rentable fraccionar los 67 mil 680 metros cuadrados del predio conocido como Cucursola.
Con el aval del organismo operador del agua, bajo la dirección de José Lara Lona, consiguió la firma del Comité del Agua de Santa Rosa, para el suministro del líquido en el hotel, aunque esta decisión de los integrantes del Comité pronto traería la inconformidad de los habitantes.
El cambio de proyecto de hotel a fraccionamiento residencial implica que el suministro de agua se duplique. En el documento original presentado al Comité de Agua de Santa Rosa el desarrollador solicitaba 700 metros cúbicos mensuales para la operación del hotel, pero en el nuevo proyecto presentado ante el Simapag para fraccionamiento residencial, la empresa del diputado panista solicita 1 mil 800 metros cúbicos de agua.
Al llegar como delegada de la comunidad Santa Rosa, Blanca Cabrera Martínez advirtió del riesgo que correrían los habitantes de la zona por el desabasto del agua, al ceder el recurso de la Presa de Peralillo para un desarrollo habitacional como el impulsado por Sergio Fernando Ascencio Barba. .
Ascencio ha pedido la colaboración del gobierno de Diego Sinhue Rodríguez para liberar los permisos estatales y municipales. El alcalde panista Alejandro Navarro Saldaña ha permitido en los últimos meses no solo la lotificación, sino que, sin permisos, la empresa ha comenzado a ofrecer los terrenos residenciales.
Aunque el Comité del Agua de Santa Rosa aseguró que no habrá sumistro para el fraccionamiento, porque así lo han pedido los pobladores, la incertidumbre del abasto del líquido no ha frenado al diputado federal del PAN y empresario, quien ya comenzó a ofertar los predios de entre 1 mil y 1 mil 200 metros cuadrados.
Origen del desarrollo
Durante la administración estatal de Miguel Márquez Márquez y el gobierno municipal de Edgar Castro Cerrillo se dieron las primeras autorizaciones para el desarrollo en el predio conocido como La Rosita; sin que exista ningún permiso por parte de Semarnat, según confirmó el exdelegado de la dependencia federal, Israel Cabrera Barrón.
El ahora diputado local por el PVEM comentó que hasta marzo de 2018 no existió en Semarnat ninguna autorización para el desarrollo ni de un hotel ni de un fraccionamiento en la Sierra de Santa Rosa. POPLab consultó con fuentes del Gobierno Federal y confirmó que no existe ante Semarnat ningún tipo de trámite en los últimos dos años para el desarrollo habitacional.
Loma de Irapuato, empresa del ahora diputado federal, realizó todos los trámites para la construcción de un hotel que no tendría más de 70 habitaciones solo ante las autoridades de Guanajuato; incluso, el Comité del Agua de Santa Rosa, con la intervención del entonces director de Simapag José Lara Lona, autorizó que pudieran extraer hasta 700 metros cúbicos de agua cruda al mes.
Sin aviso a las autoridades, el empresario y diputado federal decidió cambiar el proyecto a un fraccionamiento residencial.
El descontento que generó entre la población de Santa Rosa el comprometer el agua de alrededor de 5 mil habitantes que hay en las comunidades aledañas, obligó al Comité de Agua que preside Francisco Granado a negar una nueva autorización para que el fraccionamiento pueda tomar agua de la Presa de Peralillo.
La presa abastece del líquido no solo a Santa Rosa de Lima, sino a comunidades aledañas como Monte de San Nicolás y Las Flores.
¿Quién es Sergio Fernando Ascencio Barba?
Empresario dedicado al ramo turístico. Llegó a la diputación federal después de aspirar a ser el candidato del PAN a la presidencia municipal de Irapuato en el año 2018.
Es nieto del destacado empresario, ya fallecido, Fernando Barba, desarrollador de Villas de Irapuato; además es sobrino en segundo grado de Rafael Barba Vargas, el polémico compadre del ex gobernador Miguel Márquez, señalado reiteradametne por realizar tráfico de influencia durante su sexenio.
Su experiencia en el sector público se limita a trabajar durante un año como jefe de departamento en el área de Planeación de Sedesol, durante el sexenio de Vicente Fox Quesada como presidente de la República. Después, del 2014 al 2015 fue integrante del Consejo Municipal de Vivienda de Irapuato.
Ascencio Barba es propietario de Hotel One, es director general del Centro Corporativo Stern, director de Stain Hotels y presidente de la Oficina de Convenciones y Visitantes de Irapuato, actividades que combina con la tarea de legislador, según consta en el currículum publicado por la Cámara de Diputados Federal.
Tala a cambio de donativo de árboles al municipio
El terreno rústico conocido como La Rosita, donde actualmente se trazan 51 lotes que van a conformar el fraccionamiento Cucursola, luce talado, con varios caminos que serán los que dividan una casa-habitación de otra.
El director de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial del municipio, Juan Carlos Delgado Zárate, confirmó que el gobierno municipal otorgó los permisos para lotificar y tumbar árboles, a cambio, pidieron “compensar” con la siembra de otros árboles en la sierra y la donación de otros tantos al municipio.
En entrevista, el director de Medio Ambiente precisó que el uso de suelo de la zona es ecológico, por lo que bastaba con garantizar que los lotes serían de más de 1 mil metros cuadrados para otorgar la autorización.
“De los 1 mil metros cuadrados nada más se puede construir el 30 por ciento y el resto quedar arbolada…Lo que tumbes tienes que mitigar y compensar con siembra de árboles, y aportar de otro tipo de especies al municipio”, dijo Delgado Zárate.
La tala de árboles no solo representa un atentado para el “pulmón de Guanajuato”, que es la Sierra de Santa Rosa, sino para la fauna que habita en la zona.
En un recorrido que hizo POPLab por la zona, lugareños comentaron que la preocupación no solo es por el posible desabasto que pudieran enfrentar al conceder agua para un desarrollo residencial, sino por el atentado que pone en riesgo a especies como el venado cola blanca o el águila, que son animales que habitan en la Sierra de Santa Rosa.
Sin embargo, el gobierno de Alejandro Navarro no puso mayores trabas para validar la traza de los 51 lotes y la colocación de un tanque elevado.
Negocio pasa de hotel a fraccionamiento
Juan Carlos Delgado Zárate manifestó que desde octubre de 2018, cuando llegó a la dirección de Medio Ambiente, conoció del desarrollo en Santa Rosa, pero al revisar la documentación constató que durante el gobierno de Edgar Castro Cerrillo se dieron las autorizaciones para la construcción de un hotel, no un fraccionamiento.
Confirmó que, sin dar aviso a las autoridades, el desarrollador cambió el proyecto a un fraccionamiento aunque los estudios de impacto ambiental autorizados por el entonces Instituto Estatal de Ecología y por el gobierno municipal se basaron en la construcción de un hotel.
“Cuando yo llegué les dije: a ver, vengan acá. Suspendo las obras, (los representantes de la empresa) sacan todo el expedientecon validaciones el hotel, y los planos del fraccionamiento sin validar. Nos sentamos a platicar, (me dicen) que ya no le conviene el hotel, se pone sobre la mesa un fraccionamiento”.
Para cuando la dirección municipal se dio cuenta del cambio de plan, sin aviso de la constructora, ya tenían al 50 por ciento la construcción de una casa club para el fraccionamiento residencial en la Sierra de Santa Rosa.
Aunque Juan Carlos Delgado Zárate evadió, durante la entrevista, el nombre de la empresa y el propietario del desarrollo Cucursola, POPLab tiene copia del único documento que firmó el Comité del Agua de Santa Rosa para ceder líquido de la Presa Peralillo a Loma de Irapuato para la operación de un hotel. Además de que el documento aparece con la firma de Sergio Fernando Ascencio como administrador, también en el Registro Público del Comercio la empresa tiene como único administrador al diputado federal.
Pese a inconformidades, comercializan lotes
Una nueva violación a la normativa se dio en las últimas semanas, porque sin permiso para la venta, la empresa administrada por Ascencio Barba comenzó a ofrecer los lotes del fraccionamiento Cucursola.
A pesar de que la comunidad de Santa Rosa está en contra de otorgar agua de la Presa de Peralillo para que se abastezcan en Cucursola, panfletos con la difusión de la zona residencial ya están en circulación.
Sin el permiso del municipio, como lo confirmó el propio director de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial, no se podrían estar vendiendo los terrenos.
“Hablar de venta lo veo lejano, hay que hablar de las licencias de urbanización… Formalmente no se puede vender lotes”, declaró Juan Carlos Delgado.
Contrario a la postura de la autoridad municipal, en los panfletos donde se ofrecen los terrenos se proporciona la dirección de una página web para que las personas interesadas puedan conocer más sobre el complejo Cucursola.
Incluso, en Facebook ha comenzado a circular la oferta de los terrenos. En una publicación hecha por Ana Isabel Asencio se ofrece el metro cuadrado en 3 mil pesos. De acuerdo con Delgado Zárate los lotes no pueden tener menos de 1 mil metros cuadrados; es decir, cada terreno del fraccionamiento residencial costaría alrededor de 3 millones de pesos.
Los terrenos comenzaron a ofrecerse en redes sociales desde agosto pasado, sin que se tuviera la factibilidad de las autoridades para el abasto de agua y los permisos de Medio Ambiente y Ordenamiento Territorial.
Descontento social
Habitantes de Santa Rosa reciben agua cada tercer día, pero ante la falta de infraestructura para la colocación de medidores, la tarifa es única: cada casa paga 100 pesos mensuales.
A pesar de que no tienen el servicio de agua diariamente y recurren a almacenar el líquido, los habitantes no consideran que tengan problemas con el suministro, pero el temor de perder el servicio los ha llevado a unirse para exigir al Comité de Agua no otorgar permisos al nuevo fraccionamiento hasta que se les garantice, con estudios profesionales, que las comunidades no tendrán problemas de abastecimiento en los próximos 30 años.
Durante la reunión a la que se convocó en Santa Rosa la última semana de noviembre, la postura fue clara: no habrá agua para el desarrollo habitacional del diputado federal hasta que se presenten estudios técnicos que garanticen el suministro para las comunidades.
A Francisco Granados y Guadalupe Palacios Banda, dos de los tres integrantes del Comité de Agua, las decenas de familias que se dieron cita en la reunión exigieron no firmar un nuevo permiso para el empresario irapuatense, sin antes presentar los estudios técnicos.
Al haber firmado la autorización para la extracción de agua de la Presa Peralillo para un hotel, ahora que se cambió el proyecto a fraccionamiento quedó sin efecto el permiso que había dado el Comité de Agua, expuso Francisco Granados, presidente del Comité en Santa Rosa.
Incluso, confirmó que los representantes de la empresa los volvieron a buscar para que les firmaran un nuevo documento, pero ante la inconformidad de los habitantes, aseguró que no permitirán que se extraiga agua de Peralillo para el fraccionamiento residencial.
“Nos buscaron porque querían la firma del nuevo documento… Esperan que les demos la firma, no les podemos dar nada”.
Aunque el compromiso del Comité para no dar una nueva autorización se hizo frente a la comunidad, Francisco Granados comentó que fue el exdirector del Simapag, José Lara Lona, el que les dijo que “la presa sí daba” para compartir el líquido con el nuevo desarrollo.
“A nosotros no nos pueden obligar (a dar el agua de la presa Peralillo) porque cambiaron el proyecto”.
El presidente del Comité del Agua comentó que uno de los compromisos que hizo la empresa Loma de Irapuato, a cambio del permiso para extraer agua, fue la colocación de un tanque elevado para hacer más eficiente el suministro en la comunidad; sin embargo, ese tanque elevado se colocó en el nuevo fraccionamiento.
Navarro ignora solicitud para intervenir
Del conflicto que se agudizó en las últimas semanas del 2019 tuvo conocimiento el gobierno de Alejandro Navarro. La delegada de Santa Rosa, Blanca Angélica Cabrera presentó un escrito en la presidencia municipal donde le pide al panista intervenir.
La primera respuesta que la delegada recibió cuando preguntó cómo fue que el Comité de la comunidad accedió a dar el agua para un desarrollo sin estudios previos, llegó del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guanajuato, el organismo pidió a Cabrera no intervenir porque era un asunto que debería de tratar el Comité local que preside Francisco Granados.
El documento presentado ante la oficina de Alejandro Navarro no ha tenido respuesta después de casi dos meses.
“Desconocemos la existencia de estudios serios y técnicos que garanticen a las comunidades que dependemos de la Presa del Peralillo no nos vamos a ver amenazados por el abasto de agua”, comentó la delegada de Santa Rosa.
“Le comento al licenciado Navarro para que vea cómo estamos viviendo en Santa Rosa. Ahorita dependemos totalmente de la presa de Peralillo, es muy importante (advertir) que por un fraccionamiento nos vayamos a quedar sin agua, vamos a estar comprando pipas para mantenernos (después)”.
En el documento que tiene el sello de recibido en la presidencia municipal se le expone a Navarro la resistencia de la empresa de presentar a la delegada los estudios de impacto ambiental, permisos de construcción y el cambio de uso de suelo.
“Estamos hablando de cuidar el medio ambiente, que somos responsables de todo lo que está sucediendo con la contaminación, pero el gobierno no se está dando cuenta que con los permisos que se están otorgando todo lo que está ocasionando, estamos tumbando el pulmón de Guanajuato”.
Fraccionamiento duplica el uso de agua
Con el aval del Simapag, ahora la empresa de Sergio Fernando Ascencio Barba pretende obtener 1 mil 800 metros cúbicos de agua mensuales para el fraccionamiento, 1 mil 200 metros cúbicos más que lo solicitado para el hotel.
Mario Ortega Rodríguez, director del Simapag, confirmó que en el estudio que presentó Loma de Irapuato al Simpag se plantea que para el proyecto de 51 lotes se necesitan 0.71 metros cúbicos por segundo, lo que se traduce en alrededor de 1 mil 800 metros cúbicos al mes.
A pesar de que el Simapag no tiene la atribución de otorgar el agua al desarrollador en Santa Rosa porque la comunidad tiene su propio Comité de Agua, entre las funciones que tiene el organismo operador del agua que preside Juan Sebastián Ávila Victoria está el de revisar y validar los proyectos de inmobiliarias.
Mario Ortega confirmó que fue desde el 18 de diciembre de 2019 cuando se otorgó la viabilidad para que de la Presa del Peralillo se extraiga agua para el fraccionamiento residencial.
A cambio de la validación, Simapag pidió al desarrollador infraestructura que consiste en la colocación de dos tanques elevados, uno en la comunidad y otro en el fraccionamiento, además de una planta potabilizadora.
“Lo que el desarrollador solicita es un proyecto validado, nosotros no otorgamos el servicio (de suministro de agua en Santa Rosa), damos una factibilidad. Lo que hacemos es la revisión técnica, entre los requisitos indispensables para el desarrollo está que no se afecte la fuente de abastecimiento (Presa del Peralillo)”.
Sin ahondar en mayores detalles, el director del Simapag declaró que la validación se dio porque la presa alcanza a abastecer las comunidades de la Sierra y para el fraccionamiento residencial, aunque dijo desconocer la cantidad de metros cúbicos que consumen los habitantes de la zona.
Desde Felipe Calderón los panistas son muy proclives a cometer delitos. Panismo es sinónimo de narco y crimen.
Por lo que dice el Sr. Aguilar se requiere con urgencia otro pacto por México para que el Imperio Americano «olvide» un poco el asunto de extraditar a Calderón y con eso salvar a la democracia de este país, de lo contrario nadie va a votar por esos delincuentes del PAN y la democracia puede ser afectada.