A pesar de la adversidad y el marcador en contra, la confianza sigue intacta. La afición cementera cree en su equipo y en que este sábado lograrán la remontada para acceder a las semifinales del Guard1anes 2021. Esa ilusión no se las quita nadie y anoche lo demostraron.
Los celestes se han caracterizado por alentar a su equipo en las buenas, en las malas y en las peores, sin importar que lleven más de 23 años sin alzar el trofeo de Liga. Justo 24 horas antes del duelo de vuelta de los cuartos de final ante Toluca, la hinchada no falló e hizo lo suyo al llevarle serenata a la plantilla de jugadores para animarlos y desearles la mejor de las suertes en un duelo clave en sus aspiraciones.
La lealtad no conoce fronteras, eso quedó demostrado. Las medidas más relajadas por el Covid-19 en la capital permitieron la fiesta.
Decenas de banderas, estandartes, trompetas, tambores, bombas de humo y flash de celulares, fue como pusieron el ambiente en el hotel de concentración del equipo cementero.
Mantas con leyendas como «mi loco amor», «vamos Cruz Azul», «queremos la novena», «Hagan historia» y «Queremos salir campeón» fue como lanzaron el respaldo total a los suyos. Mientras que los cánticos «Vamos Cruz Azul que tienes que ganar» y el «volveremos a ser campeones como en el 97», retumbaron por todo Periférico Sur, ante la mirada de varios curiosos.
Los jugadores no fueron ajenos al festín y después de una hora, salieron unos momentos a la entrada del hotel para agradecer el apoyo. Luis Romo incluso se le vio con una bandera, mientras otros como Jesús Corona, Julio César Domínguez y Jonathan Rodríguez grababan con sus celulares. La tarea no es nada complicada, un solo gol en el estadio Azteca y una portería impenetrable les basta, algo que ha sido una costumbre en este torneo.
La plantilla cementera durmió con ánimos recargados y con el conocimiento de que tienen a los suyos completamente de su lado.
La afición celeste confía en la remontada y en que La Máquina arrolle a los Diablos Rojos en el Coloso de Santa Úrsula. Ellos ya hicieron lo suyo, ahora todo dependerá de que los jugadores les respondan de la mejor forma, tal y como ellos sueñan.
La afición cementera no abandona y confía en la Máquina para el partido de vuelta el día de mañana