La Ley Federal de Protección al Consumidor nos ampara y gracias a ella podemos exigir que los proveedores de productos o servicios cumplan al cien por ciento.
Te invitamos a conocer y hacer valer tus derechos básicos como consumidor:
Derecho a la información: Toda la información de los bienes y servicios que te ofrezcan debe ser oportuna, completa, clara y veraz.
Derecho a la educación: Es importante conocer tus derechos y la forma en que te protege la ley para aprender a consumir mejor y de manera más inteligente.
Derecho a elegir: Al escoger un producto o servicio, nadie te puede presionar, condicionar la venta, exigir pagos o anticipos sin que hayas firmado un contrato.
Derecho a la seguridad y calidad: Los bienes y servicios deben de cumplir con las normas y disposiciones en materia de seguridad y calidad.
Derecho a no ser discriminados: Nadie te puede negar un producto o servicio por tu sexo, raza, religión, condición económica, nacionalidad, orientación sexual, ni por tener alguna discapacidad.
Derecho a la compensación: Si te venden un producto de mala calidad, tienes derecho a que se te reponga o a que te devuelvan tu dinero y, en su caso, a una bonificación no menor a 20% del precio pagado.
Derecho a la protección: Cuando algún proveedor no respete tus derechos o cometa abusos en contra de los consumidores, Profeco es la institución que salvaguarda tus derechos y los defiende.
Uno de los casos más frecuentes que afecta a los consumidores es el error en el etiquetado de precios; como sustento legal para algún reclamo, se deben citar los artículos 7 y 7 bis de la Ley Federal de Protección al Consumidor; toda vez que el primero establece que los proveedores deben respetar los precios que se exhiben; mientras que el 7 bis señala textualmente que “El proveedor está obligado a exhibir de manera visible el monto total a pagar por los bienes, productos o servicios que ofrezca al consumidor”.
Aunque hay quienes piensan que este tipo de normas solo ayudan a los “abusivos”, como señala Norma, quien trabaja en una conocida tienda departamental y expresa: “Mucha gente va y se aprovecha de algún error que nosotros como trabajadores podemos tener, ha habido casos de gente que se lleva hasta 5 pantallas a un precio casi regalado y a mí me parece un abuso”.
Lo cierto es que las Leyes son muy puntuales y ante algún problema de esta índole, te sugerimos dirigirte a la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco); llamando a los teléfonos (55) 5568 8722 y 800 4688722, o bien enviar un mensaje de WhatsApp a los números 55 8078 0485, 55 8078 0488 y 55 8078 0344.
También existe la opción de contactar a la Profeco con mensaje directo a sus redes sociales.
Karina Reyes, ciudadana salmantina de 35 años nos comenta que se deben tomar en consideración ciertas medidas que, por ejemplo, existen en el país vecino del norte: “Hace algunos meses fui a Estados Unidos y compré ropa y otras cosas en una tienda; pero con el tema de la pandemia, los vestidores estaban cerrados, así que todo lo que me llevé, lo hice sin probármelo. Llegué a casa y varias prendas no me quedaron, y al volver a buscar otra talla no encontré la que buscaba, entonces mi amiga me dijo que pidiera un reembolso, así lo hice y sin cuestionamientos, ellos solo recibieron la ropa y yo mi dinero de vuelta; aquí en México si acaso te cambian los productos o tal vez te regresen la cantidad pero siempre será en alguna tarjeta que solo puedas usar en ese establecimiento; francamente pienso que también debería existir la opción de que te regresen el efectivo, sin tantas trabas”, explicó.
En el Día Mundial de los Derechos del Consumidor se busca la protección de los consumidores, logrando de esta manera recuperar, reconocer y legalizar los derechos de estas personas a nivel internacional.