Pablo Esparza es un joven salmantino invidente el cual vende hielitos de nombre «bonice», ganando $1.00 por unidad vendida, con dicha comisión es casi imposible poder subsistir, pide apoyo para mejorar sus condiciones de vida pues su domicilio esta hecho de tabicón, sin ventanas, techo de laminas en algunos pedazos al cielo abierto situación que en esta temporada de lluvia moja sus pertenencias, sin luz y sin agua así es como vive su día a día.

Actualmente Pablo se encuentra buscando un cuarto con servicios que le presten o renten a un precio accesible una persona de buen corazón, pues su único ingreso es la venta de bonice en la cual necesitaría vender 100 hielitos para poder llevar a su casa tan solo $100.00, dicha venta se complica debido a su discapacidad visual, sin duda alguna un joven trabajador que le gustaría salir adelante por lo que busca una oportunidad que pudiera mejorar su calidad de vida, por desgracia el campo laboral en Salamanca aún no es muy inclusivo.

Todos aquellas personas de gran corazón que deseen apoyarle, hablar con él y conocerlo u ofrecerle un trabajo estable y con una mejor remuneración que la de su actual empleo, lo pueden localizar en su habitación en la calle Madre Selva #201 colonia San José, afuera del Colegio Inés Maria Gasca en la calle Juárez de 13:30 a 14:00 horas.

La gente de Salamanca se caracteriza por ser cálida y solidaria con sus semejantes y Pablo lo sabe, por eso nos ha pedido por medio de nuestro portal de noticias solicitar a su nombre apoyo monetario o en especie para su persona, mismo que usted podrá entregarle directamente a él.