La Universidad de Guanajuato financió el viaje de Luis Felipe Amilkar Guerrero, hijo del exrector Luis Felipe Guerrero Agripino, a La Haya, Países Bajos, mediante el Sistema de Becas y Apoyos Institucionales de la UG. Según informes, entre marzo y abril, la institución otorgó 53,786 pesos para permitir su participación en el Concurso de Simulación Judicial ante la Corte Penal Internacional, celebrado del 24 al 31 de mayo.
Esta acción ha generado controversia debido a las carencias y limitaciones que enfrentan otros estudiantes universitarios para acceder a oportunidades similares de formación en el extranjero. A pesar de que Luis Felipe Guerrero Agripino cuenta con una pensión y un contrato que le proporcionan más de 106,000 pesos mensuales, y que durante su rectorado se estima que recibió más de 19.2 millones de pesos, se optó por solicitar el financiamiento a la Universidad de Guanajuato en lugar de financiar el viaje con recursos propios, lo que podría haber abierto la oportunidad para otro estudiante.
Durante su rectoría, Luis Felipe Guerrero Agripino tenía un salario mensual de más de 200,000 pesos, incluyendo una beca como investigador del Conacyt. A pesar de la solvencia económica evidente de la familia, la solicitud de apoyo para el viaje de su hijo fue aprobada rápidamente por la Rectoría General, mientras que otros estudiantes enfrentan un proceso más complejo y menos ágil para obtener apoyo similar.
Aunque la información sobre estos financiamientos debería ser de dominio público, la actual rectora Claudia Susana Gómez López solicitó mantener la información reservada para supuestamente proteger a los beneficiarios.