La presidenta electa de México, Claudia Sheinbaum, afirmó que no hay razón para preocuparse por la Reforma a la Guardia Nacional, garantizando que los Derechos Humanos serán plenamente respetados.
Este tema se debate actualmente en la Cámara de Diputados, donde se plantea la incorporación de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA). Sheinbaum subrayó que esta medida no implica una militarización del país, asegurando que los Derechos Humanos seguirán siendo una prioridad para todos los mexicanos.
También pidió a los organismos internacionales no alarmarse, explicando que la reforma busca fortalecer una institución de carácter civil y no tiene relación con una militarización, pese a las críticas que han circulado en redes sociales y medios de comunicación.
Durante su llegada a la «Casa de Transición», Sheinbaum explicó que una militarización implica que el mando militar tomaría decisiones de forma autónoma, lo cual no es el caso en México. Aclaró que el país seguirá bajo un mando civil, y que, a partir del 1 de octubre, por primera vez en la historia, una mujer, como Comandanta Suprema de las Fuerzas Armadas, será quien tome las decisiones en esta materia.