La reforma que busca transferir el mando civil de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha alcanzado la aprobación de 21 congresos locales, superando el umbral mínimo de 17 de las 32 legislaturas estatales requerido para su promulgación. Esta medida, que también otorga facultades de Ministerio Público a la Guardia Nacional, está a punto de formalizarse, según lo anunciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Varios estados han dado su respaldo a la reforma con votaciones diversas. En Puebla, la minuta fue aprobada con 33 votos a favor y 7 en contra, mientras que en Veracruz obtuvo 35 a favor y 9 en contra. Chihuahua la ratificó con 25 votos a favor frente a 7 en contra, y en Nayarit el apoyo fue de 24 a 6.

En otros casos, como en Tamaulipas, la votación fue de 18 a favor y 10 en contra. En la Ciudad de México, la reforma contó con 42 votos a favor y 19 en contra, mientras que Quintana Roo y Yucatán registraron 17 a favor y 4 en contra, y 18 a favor y 16 en contra, respectivamente.

En Morelos, la aprobación fue con 14 votos a favor y 6 en contra; Guerrero la respaldó con 32 votos a favor, y Colima con 18 a favor y 6 en contra. En Durango, se alcanzaron 19 votos a favor y 5 en contra, destacándose el apoyo de la bancada del PRI.

Otros estados como Zacatecas y Tabasco también dieron luz verde a la reforma, con 18 a favor y 12 en contra en el primero, y 27 a favor y 8 en contra en el segundo. Oaxaca aprobó la reforma con 34 votos a favor y solo 2 en contra.

Aunque Nuevo León aún no ha llevado la votación al pleno, habiéndola aprobado solo en comisiones, el avance de la reforma es claro. Este panorama refleja un ambiente legislativo dividido, con fuertes debates en los estados que aún no han votado, mientras la medida sigue consolidándose para su promulgación definitiva.