EN LUGAR DE FLORES Y FRUTOS LE BROTAN ESPINAS AL ARBOL DE LA CRUZ EN UN CONVENTO DE QUERETARO
Querétaro, Querétaro. Único en el mundo así esta considerado un árbol que dada su antigüedad y leyenda, sigue causando asombro a propios y extraños, que llegan a este lugar para corroborar la perfección de las espinas, que da el prodigioso arbusto y que forman perfectamente, la figura de la cruz.
La leyenda dice que fue en 1697, cuando el Franciscano Antonio de Marfil de la Cruz uno de los primeros evangelizadores llegados a estas tierras, había colocado su bastón para descansar bajo la sombra de un árbol, después de un largo recorrido por las comunidades indígenas, quedándose dormido por el cansancio y así fue que, posteriormente despertó pero, su bastón de apoyo quedo en ese lugar enterrado.
Fue así como al paso del tiempo lo que fue un bastón retoño, convirtiéndose en lo que actualmente es el frondoso arbusto que a perdurado hasta nuestros días, en los patios del convento y la Iglesia de la Santa Cruz, como fue denominado.
Muchos son los milagros que se dice, al tan solo obtener una espina en forma de cruz de este árbol que, enfermedades incurables han sido sanadas, e inclusive atrae la armonía familiar de las personas.
Los testimonios se suman por miles que, a través del tiempo aun son comentados por los viejos lugareños, que sentados en los jardines que circundan este bello lugar, dan un toque mágico e incrementan el interés de los visitantes.
Ya que se cuenta que este hecho, marco un cambio entre los antiguos pobladores que recibieron la señal prodigiosa de la Fe, y se incorporaron a la evangelización mansamente, pues veían a Fraile Antonio de Marfil, como un verdadero enviado de Dios.
Fue poco el tiempo que paso el bondadoso Franciscano por este sitio, ya que fue enviado hacia nuevas misiones a Costa Rica, Honduras, El Salvador, Nicaragua y parte de la Unión Americana, contándose catorce años de servicio.
Este árbol se encuentra en el interior de los jardines del Convento, llamado de la Santa Cruz de los Milagros, que fue fundado en el año de 1683, y que marcó la pauta para la fundación de la ciudad de Querétaro.
De esta manera grupo de Investigación Paranormal, realizo un estudio de campo para determinar la popularidad de este arbusto, que sigue produciendo miles de espinas en forma de cruz cada año, que asemejan ser incrustadas en sus tallos, sin aparición de flores o frutos.
Por lo consiguiente pudimos apreciar que los visitantes, se aglomeran para llegar al sitio donde a estado por más de trescientos años, y que según se dice, continua realizando verdaderos milagros, a través de las espinas en forma de cruz de este árbol, las personas están protegidas de cualquier situación en sus caminos, por lo que, los visitantes procuran no abandonar el convento e Iglesia, de la santa cruz de los milagros hasta obtener, una reliquia del lugar.
Querétaro es mágico y místico a la vez, el espíritu del religioso Antonio de Marfil, ronda por los jardines donde su bastón cobro vida, y sigue llenando de fe, al corazón de los feligreses, y despertando la curiosidad de numerosas personas, pues este hecho está considerado, como único en el mundo.
El maestro Eulogio Soto Mahe.
