La Selección Mexicana Sub-23 de voleibol de sala hizo historia este fin de semana al adjudicarse la medalla de bronce en la Copa Panamericana, luego de superar a la escuadra de Cuba en un duelo de alto voltaje que se definió en cinco emocionantes sets.
El encuentro, disputado en el Domo de la Feria en León, Guanajuato, mantuvo al público al filo de la butaca. Tras un intenso intercambio de jugadas y puntos decisivos, México logró imponerse y asegurar un lugar en el podio del torneo continental.
La victoria no solo significa una presea para el voleibol mexicano, sino también un paso firme en el desarrollo de la nueva generación de atletas nacionales, que demostraron carácter, disciplina y talento frente a un rival de tradición como lo es Cuba.
Con este resultado, México cierra su participación en la Copa Panamericana Sub-23 con una medalla que reafirma su crecimiento en la disciplina y deja expectativas altas rumbo a futuras competencias internacionales.



































