Los cruces ferroviarios en Salamanca representan un peligro constante para automovilistas y peatones, debido a los severos daños que presentan en su superficie. En varios puntos, los rieles se encuentran rodeados de grandes baches que han sido cubiertos únicamente con grava, lo que genera inestabilidad y riesgo de accidentes.
Quienes transitan por estas zonas deben maniobrar con extrema precaución. Automovilistas aseguran que, al intentar esquivar los hundimientos, muchas veces se ven obligados a hacerse a un costado; sin embargo, si no lo hacen con suficiente cuidado, los vehículos pueden caer en las vías, quedar atascados e incluso enfrentarse al riesgo de un impacto directo con la máquina ferroviaria.
Los cruces con mayor afectación se ubican en Faja de Oro e Insurgentes, a la altura de la colonia Villarreal, así como en el cruce de Insurgentes y Pluripartidista, donde ciudadanos han reportado condiciones críticas y, de acuerdo con testimonios, ya se han registrado siniestros de este tipo.
Sin embargo, no son los únicos cruces en malas condiciones, sino también aquellos ubicados en Sánchez Torrado y afuera de la puerta 5 de Petróleos Mexicanos.
Vecinos y conductores coinciden en señalar la urgencia de que las autoridades municipales y ferroviarias atiendan esta problemática, ya que el mal estado de los cruces no solo genera daños a los vehículos, sino que representa un riesgo directo a la vida de quienes circulan por estas vialidades.
La exigencia ciudadana es clara, se requiere mantenimiento inmediato y de calidad en estos puntos, pues la situación actual convierte el tránsito cotidiano en un acto de riesgo, con la posibilidad de que ocurra un accidente mayor en cualquier momento.


































