En los días pasados, al menos 80 perros y gatos fueron envenenados en comunidades de Guanajuato, Chiapas y Veracruz, mientras que en Veracruz se rescataron 43 animales en condiciones críticas. Hasta el momento, no hay detenidos ni avances oficiales en las investigaciones.
En San José Iturbide, Guanajuato, al menos 20 perros y gatos fueron hallados muertos en la colonia Prados del Rosario. Algunos presentaban una sustancia amarilla en el hocico, lo que sugiere el uso de croquetas contaminadas. Hasta el momento no hay una respuesta oficial por parte de las autoridades estatales.
En Joltzemén, comunidad tzotzil de San Juan Chamula, Chiapas, se reportaron 60 perros intoxicados. Vecinos denunciaron que desconocen quién está colocando veneno en la zona, lo que ha generado temor y un llamado urgente a las autoridades locales. “No sabemos quién o quiénes están tirando veneno para exterminar a los caninos”, aseguraron.
Al mismo tiempo, en Medellín de Bravo, Veracruz, autoridades y organizaciones rescataron a 43 animales de un refugio en estado de abandono. Los ejemplares presentaban enfermedades y desnutrición, por lo que fueron trasladados para recibir atención médica y reubicación.
Los tres casos han generado una gran ola de exigencias en redes sociales entre animalistas y ciudadanía en general, los cuales piden protocolos de protección animal, sanciones claras y acciones inmediatas para dar con los presuntos responsables.



































