El Puente de Héroes de Cananea, una de las obras más transitadas de Salamanca y que se prometió como un avance en infraestructura para la zona, se ha convertido en reflejo del abandono y la falta de mantenimiento urbano. Lejos de ser una vialidad moderna y funcional, hoy luce grafiteado, con señalamientos doblados, registros rotos y espacios comerciales en completo abandono.
Y es que a simple vista, el deterioro es evidente, pues las bardas y columnas están cubiertas por grafitis, los señalamientos viales que deberían orientar a los conductores permanecen vandalizados o semi caídos dando una pésima imagen urbana.
Los locales comerciales que se encontraban en los laterales del puente y que daban vida al espacio y fomentaban la economía local, ahora están completamente abandonados, e incluso algunos han sido utilizados como espacios de vandalismo y escondite para los maleantes.
Pese a que el puente fue inaugurado con la promesa de mejorar la movilidad y darle una nueva imagen a la zona, hoy se ha convertido en un punto que retrata la falta de atención y seguimiento por parte de las autoridades. Mientras tanto, los ciudadanos se preguntan cuánto tiempo más deberá pasar para que se dé mantenimiento a una infraestructura que, por descuido, se está deteriorando a pasos acelerados.
Aunque las autoridades han prometido en diversas ocasiones programas de rehabilitación de espacios públicos, en este punto de la ciudad la realidad es otra.


































