A partir de mayo de este año ya entró en operación comercial el proyecto de la central de Cogeneración de Energía en Salamanca, es decir, que la Comisión Federal de Electricidad ya comenzó a vender energía limpia.
La central ha permitido reducir las emisiones contaminantes por el uso de combustóleo para producir vapor, también ha permitido el ahorro de agua y ha incrementado la producción de energía.
Gabriel Miranda Galindo, subgerente de Evaluación de Emisiones de la CFE, explicó que la central opera con tan sólo 72 personas.
La central genera 662 toneladas de vapor entre alta y baja presión con la que se ahorra agua ya que del vapor producido se recupera el 60 por ciento para utilizarlo nuevamente en el proceso.
Además con la planta de cogeneración se han dejado de utilizar 11 mil barriles de combustóleo por día y se reduce alrededor de 2 millones de dióxido de carbono para beneficiar a la cuenca de salamanca y sus alrededores donde habitan 1.3 millones de personas.