- Integrante del comité de las fiestas de Santa Cecilia con apoyo de familias hicieron posible su resurgimiento con procesión a cargo de jóvenes del grupo de Danza.

El resurgimiento de la tradición de las Posadas en Congregación de Cárdenas, lograron retomar habitantes de la comunidad, después de varios años de una tradición extinguida, como resultado de un esfuerzo conjunto impulsado por integrantes del Comité de Fiestas de Santa Cecilia con el apoyo y colaboración de familias que con toda generosidad, hicieron posible la consolidación en el segundo año de su realización
Para esta nueva etapa de la tradición, a iniciativa e inquietud de los jóvenes del Grupo de Danza, fue posible que las posadas se restituyeran como en épocas pasadas, “y nos dimos a la tarea de buscar a familias que nos apoyaran”, encontrando gran disposición y generosidad de las familias benefactoras quienes hicieron posible que a lo largo de los nueve días se recordara el peregrinaje de María y San José en su camino a Belem.

Con esta suma de esfuerzos fue posible, y para hacerlo más representativo, se envistieron de los personajes del Misterio viviente del Pasaje en el que se recuerda a la Madre de Jesús en sus últimos día de gravidez, a su esposo San José, el Ángel y los Pastores, recorriendo las calles de la colonia y los alrededores del parque en honor a Santa Cecilia.
La señora Leticia una de las promotoras de la tradición, destacó que el hecho de convocar a las familias, fue propiciar la unidad, la convivencia y sobre todo la unidad familiar, para que a través de esta tradición, motivar la integración de los jóvenes a fin de involucrarlos en actividades y costumbres de ésta su comunidad.
Fue así como al final de la procesión a cargo de los personajes Evangelios por calles de colonias del sur de la comunidad de Cárdenas, entre cánticos se realizó el rosario y al finalizar, los anfitriones de la posada, compartieron con los asistentes algo de lo que el Creador los proveyó durante este año, con la entrega de aguinaldos que los pequeños festejaron, finalizando la algarabía al quebrar la piñata y su lluvia de dulces.


































