Antes se apartaban, ahora se pintan.
En diversos puntos, sobre todo en zonas donde es habitual el comercio o algún tipo de actividad recreativa, es común ver botes con cemento, cajas, huacales y todo tipo de artículos colocados en la calle, justo a un lado de las banquetas, con el fin de ‘apartar’ un espacio para estacionar un vehículo.
Esto a su vez, delimitaba el espacio de circulación para los transeúntes y conductores de la zona, por lo que la afluencia era más lenta y en algunas ocasiones, ocurrían accidentes de tránsito.
Fue por ello, que se optó por delimitar los espacios, colocando señalamientos y pintando espacios en la cinta asfáltica, lo cual permitiera o no, a los conductores disponer se ese lugar.
Sin embargo, ante la falta de lugares, algunos vecinos de la zona centro, han optado por pintar sus propios cajones, delimitando el área del cual harán uso. Incluso, cuando estas estén ocupando lugares particulares.
Este, es un mecanismo no regulado, que urge atender, puesto que la afluencia vehicular y peatonal en la zona centro, sobre todo en el mercado Tomasa Esteves ya es lenta, con una dinámica así, retrasará más la circulación y puede dar origen a algún percance.