Al día, dos mil armas procedentes de Estados Unidos entran ilegalmente a México para acabar en manos de la delincuencia organizada, afirmó el comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales, en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Sales relaciona esta cifra con el aumento de homicidios con este tipo de armas en México, ya que en 2006 eran 3 de cada 10 los asesinatos con arma de fuego y en la actualidad 7 de cada 10, explicó en el Encuentro Académico sobre Prevención de la Violencia Armada y Delitos Relacionados con Armas de Fuego.
Además, el comisionado comentó que en Estados Unidos es el país con más armas del mundo, puesto que hay más de 300 millones y que de estas «la mayor parte se concentran en los estados fronterizos con México».
Por su parte, la subprocuradora de Derechos Humanos, Prevención del Delito y Servicios a la Comunidad de la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía), Sara Irene Herrerías, manifestó que las armas de fuego también se utilizan en la delincuencia común y coincidió con Sales en que la escasa regulación del país vecino hace que este mercado sea muy difícil de perseguir.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2018, 42.2 % de víctimas de delitos en México dijeron que sus atacantes llevaban un arma de fuego, según comentó la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez.
Ramírez consideró que es necesario construir un programa integral de desarme, pero que «se necesita prevención social de la violencia, que no solo implica desarmar, sino desnormalizar el uso de armas de manera integral», concretó.
«Tenemos que mitigar la presencia de armas en las calles y en la sociedad para vivir en paz», concluyó Magda Coss, directora de la asociación civil 24-0 México, a la vez que pidió que se impulse el debate del control de armas en la agenda pública.
Con información del Excelsior