Por: Observadora exterior.
Buenos días lectores, aparentemente el ya famoso “cartel de los Arriaga” está dispuesto a beneficiarse de su mandato hasta el último segundo de la administración, pues nuevamente se deja ver el beneficio que ahora la obra del distribuidor vial del DICIS trajo para “el patrón” y, a propósito de obras, muy tarde emitió el gobernador su recomendación para no ejecutar obras ostentosas sino con sentido social. Aquí la opinión de la semana.
Más beneficios para “el patrón”.
Con falta de maestros y de escuelas dignas en el nivel de educación básica, el pasado lunes el gobernador del estado Miguel Márquez Márquez, puso en marcha oficialmente el ciclo escolar 2015-2016 en Salamanca, donde también entregó el distribuidor vial de acceso al DICIS de la UG-antes FIMEE y que en menos de 24 horas de su inauguración se “estreno” con un accidente-y que se integra a la red de carreteras de Guanajuato, pero el impacto de la obra queda opacada con su trasfondo, pues no es casualidad que el distribuidor se haya construido de tal manera, relegando así a los habitantes de la comunidad de Palo Blanco quienes desde que supieron que el DICIS se construiría en su comunidad pronosticaban, al fin, un progreso que ahora se ve frustrado. Y la seguridad de los alumnos y docentes del DICIS fue la excusa más apropiada de esta obra, pues quizá el principal interés fue el de mejorar y dar mayor plusvalía a las tierras de “el patrón” quien con “moche” o sin él, como quiera recibió recursos públicos por el “pago de afectaciones” para la construcción del distribuidor vial. Parece que el ya famoso “cartel de los Arriaga” seguirá aprovechando a su beneficio hasta el último segundo de su mandato.
Ni la burla perdona.
Quien ya ni la burla perdona es el gobernador del estado quien demasiado tarde-al menos para los salmantinos-hizo un llamado a no hacer obras ostentas, sino con sentido social, es decir, todo lo contrario a lo que la actual administración ha hecho en Salamanca en cuanto a obra pública se refiere y para muestra, ahí está la ciclovía que sólo en la construcción de la línea 1-de un total de 15-se derrochan unos 40 millones de pesos a pesar del rechazo social mayoritario por esta obra y aunque el gobernador ya envío a un representante del gobierno del estado a reunirse con ciudadanos para conocer los motivos de su oposición a la obra, quien por cierto no dejaba de sorprenderse por la evidente mala planeación y los múltiples problemas que su construcción ha ocasionado; pero, lo importante será lo que resulta de este acercamiento y esperemos que no haya sido solo para calmar las aguas, pues no olvidemos que no tiene culpa el que da “atole con el dedo” si no quien lo acepta.
Último informe.
Mañana regresa oficialmente a asumir nuevamente su cargo Justino Arriaga Rojas como presidente municipal de Salamanca y digo oficialmente porque aunque estaba de “licencia” hacia acto de presencia en los más importantes eventos públicos-ahí, si de daba su tiempecito para no faltar-y a sólo escasos 40 días de que termine su administración, quizá su regreso sea sólo para prepararse para rendir su tercer informe de gobierno que seguramente no será público y estará exageradamente custodiado. No sería de sorprender que este último informe el alcalde derroche cientos de miles de pesos como ha sucedido en los dos informes pasados y de los cuales por cierto, hasta este momento la unidad de accesos a la información pública no ha sido capaz de demostrar las inconsistencias en los gastos que el municipio realizo. Aquí la pregunta obligada es ¿qué va a informar? Pues, su administración ha sido considerada como la peor en la historia de Salamanca por el descaro y fuertes señalamientos en corrupción, “moches”, falta de transparencia y rendición de cuentas, carente de sensibilidad social y el autoritarismo.
Haciendo tiempo.
Seguramente las auditorias que dice llevar a cabo el contralor municipal desde hace meses y que aún no ha sido capaz de concluir, quedarán en el tintero y terminaran por resolverse-si así sucede-en la próxima administración, mientras les dan chance a los responsables de sacar de donde puedan la documentación y pruebas necesarias para solventar las irregularidades encontradas, por “pequeñas” que parezcan. Y por otro lado, quizá no sea el proceso de entrega recepción lo que este retrasando la conclusión de las auditorias, sino la falta de compromiso de los directores de área, pues en lugar de hacer su chamba, muchos servidores públicos al mando de diferentes dependencias municipales no se pierden ningún evento público, como si les pasaran lista.
Aquí la quiero.
Parece que a como dé lugar la actual administración quiere que la Gendarmería instale en un nuestro municipio un campamento, tan es así, que a pesar de no hay nada oficial por parte de la dependencia de seguridad federal, el municipio a través de la comisión de desarrollo urbano ya está analizando “el impulso que se le pueda dar al proyecto”, según dijo el encargado de despacho de la presidencia municipal, José Fuentes Serrato, lo que claramente deja ver la falta de compromiso, de análisis, de planeación y de proyección por parte del gobierno municipal para realizar proyectos y obras que verdaderamente se necesiten. Lamentablemente quienes toman las decisiones en nuestro municipio no acaban de entender que no se trata de hacer o deshacer por ocurrencia, capricho o antojo. Por favor señores, no se les pide tanto, más que un poquito de sentido común y tantita política pública.
Ni una ni otra.
Lo que es un hecho es que teniendo o no presencia de la Gendarmería en Salamanca la delincuencia menor y la delincuencia organizada están aniquilando por completo la tranquilidad de los salmantinos y ahora resulta que a las autoridades municipales solo les preocupan los delitos dolosos y de alto impacto porque según el coordinador de Seguridad Ciudadana, los índices de delitos menores se han mantenido estables. Lo preocupante es que no se atiende ni una ni la otra, pues cuando se presentan delitos del fuero federal se lavan las manos o ni se enteran y cuando se trata de atender denuncias por actos de delincuencia menor, la policía siempre llega tarde al llamado o a veces ni llegan. Así que de qué sirve que reconozca un aumento en delitos de alto impacto si pareciera que no pasa nada.
Certificación.
Y mientras la población se sigue quejando de la falta de atención en el 066, el gobierno municipal ya da por hecho que obtendrá la certificación de la Comisión de Acreditación de Corporaciones de Seguridad Pública (CALEA), un organismo internacional que se dedica a evaluar los sistemas y corporaciones de seguridad pública que aspiran a la excelencia en sus servicios. Pero, el municipio aún no tiene la certificación y ya comenzaron las primeras falsedades, pues señalo que de obtenerla, Salamanca sería el único municipio en el país con esta certificación cuando hay algunos municipios que ya la tienen-como Puebla y de donde seguro copiaron la estrategia-y la otra es que según al municipio le costará unos 130 mil pesos cuando hace más de dos años otros municipios han pagado por dicha certificación unos 200 mil pesos obtenga o no la certificación.
Cultura cívica.
Estamos a punto de darle la bienvenida al mes patrio y con el vienen una serie de festividades y tradiciones para celebrar la independencia de nuestro país. En varios estados de la República, entre ellos, Guanajuato, es tradicional en el mes de septiembre realizar la Cabalgata por la Ruta de Independencia en la que participan más de 10 mil cabalgadores, pero que este año no han encontrado el apoyo en cuanto a vialidad y seguridad por parte de los presidentes municipales para llevarla a cabo, y es que como ya van de salida, pues poco les preocupa su fingido amor y respeto a nuestros símbolos patrios y a los héroes de la independencia. Así que para quienes verdaderamente pretenden fomentar de esta manera la cultura cívica, este año el cometido se torna complicado.
El dato curioso.
Y donde ya andan haciendo negocio a pesar de que el reglamento prohíbe es dentro de las instalaciones de la Refinería Ing. Antonio M. Amor, hasta con terminal bancaria aun y cuando según era para una obra benéfica ¿será?
