* Practicar actividad física bajo supervisión médica e instructores disminuye el riesgo de sufrir lesión en articulaciones, músculos y tendones.
Al tomar la decisión de practicar algún deporte o iniciar actividad física requiere de compromiso y la orientación de expertos para lograr que los resultados esperados se obtengan mediante metas razonables y sin consecuencias para la salud.
Pedro Torres Saucedo, jefe del departamento se Deporte y Cultura Física, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en Guanajuato, indicó que tanto el deportista de fin de semana como aquellas personas que hacen ejercicio sin supervisión profesional están expuestos a graves daños.
Lesiones en músculos, articulaciones, desgarres, fisuras, fracturas y la ruptura de tendones que comprometen la funcionalidad y productividad de las extremidades son las principales consecuencias que pueden sufrir, sobre todo quienes realizan ejercicio tres o menos veces a la semana o se mantienen con estilo de vida sedentario, resaltó.
Recordó que la obesidad es un problema de salud que aqueja a la población debido a la falta de ejercicio, y ésta es causa de complicaciones como la diabetes, hipertensión y enfermedades osteo-degenerativas, entre otras.
Señaló que a partir de los 30 años de edad las personas se deben practicar una prueba de esfuerzo para determinar la actividad adecuada a su estilo de vida, ya que el ejercicio debe ser programado y bien dosificado.
Torres Saucedo recomendó comenzar con rutinas ligeras aeróbicas como caminata de 15 minutos y cada dos o tres días aumentar cinco minutos, sobre todo si no se ha tenido actividad en un buen tiempo.
Practicar bicicleta estática o al aire libre, natación y baile de salón también son ideales para quienes inician o retoman actividad física, debido a que implican poco impacto a las articulaciones.
En los gimnasios es necesario recurrir con el instructor o alguna persona que asesore para llevar una rutina sin sufrir lesiones, toda vez que el rendimiento y esfuerzo varían entre cada persona, de acuerdo a sus condiciones físicas y de salud en general, detalló.
Reiteró la importancia de acudir a sus Unidades de Medicina Familiar para que el nuevo deportista reciba orientación integral; es decir, que además de conocer la actividad física adecuada a su estilo de vida, también lleve a cabo una alimentación balanceada.
Todo ello, añadió, incrementará las posibilidades de lograr el objetivo de bajar de peso, recuperar la condición física y, sobre todo, mejorar el estado de salud al disminuir los riesgos de sufrir alguna enfermedad crónico-degenerativa. Lograr metas programadas a diferentes plazos, dijo, motivará a la persona para continuar con el nuevo estilo de vida saludable.
Por último, recomendó a la población incorporarse a las actividades deportivas que se ofrecen en el Centro de Seguridad Social, en las Instalaciones de la Delegación del IMSS en León, Guanajuato, donde personal capacitado podrá asesorarlo en la realización de alguna actividad sin poner en riesgo la salud.