Tras su avasallador triunfo en los comicios del pasado 1 de julio, Andrés Manuel López Obrador remarcó que tras 18 años de lucha hoy puede decir que la “perseverancia” ha sido la principal clave por la cual hoy esté a meses de sentarse en la silla presidencial.
López Obrador explicó que la perseverancia, el no rendirse y el luchar por sus ideales y principios lo mantuvieron en pie durante tres sexenios dando esta batalla que finalmente ganó.
“Te puedes caer”, dijo, “pero tienes que volver a levantarte. Levantarse y levantarse hasta lograrlo. Y lo logramos, y esto es y será para el bien de México”, señaló.
Lo sucedido el domingo “es un triunfo de millones de mexicanos. No es nada más el triunfo de un dirigente. Es de todo un pueblo, de mucha gente que ha estado insistiendo en que haya un cambio”.
“Y como lo he venido diciendo durante meses —prosiguió—, cualquier transformación no surge de la noche a la mañana. El triunfo de nuestro movimiento es el resultado del esfuerzo, de la fatiga. El resultado del sacrificio de muchos dirigentes sociales, de gente que nos ayudó, de personas que incluso ya se nos adelantaron en el camino, pero al final esto es un triunfo de todos”, sobre todo de quienes “mantuvieron viva la llama de la esperanza”.
El líder nacional de Morena reconoció sentirse muy satisfecho, pero por sobre todo muy agradecido con los mexicanos.
Y en este agradecimiento al pueblo de México, detalló: “Asumo mi compromiso de encabezar este movimiento de transformación. No les fallaré y voy a estar a la altura de los ciudadanos”, remarcó.
Sobre el reconocimiento que le expresaron sus adversarios José Antonio Meade, Ricardo Anaya y Jaime Rodríguez El Bronco, dijo que los tres fueron “muy respetuosos, se portaron muy bien”.
Pidió un voto de confianza a la población que no votó por él o que recela como consecuencia de la serie de campañas de desprestigio en su contra.
“Los vamos a respetar a todos. No soy una persona rencorosa y tampoco es mi fuerte la venganza”. En ese sentido, explicó que él y su equipo de trabajo buscarán la reconciliación nacional.
“Las personas poco a poco se irán dando cuenta de que el cambio es y será para el bien de los mexicanos”. Es un cambio necesario, dijo, “para renovar la vida pública del país, porque ya no podíamos seguir con el mismo régimen caduco, de corrupción, de injusticias y de privilegios”.
Sobre quienes echaron a andar la idea de que implantaría un gobierno similar al de Venezuela, precisó que su triunfo traerá exactamente lo contrario a México, porque lo que se intentará desde un principio es construir una verdadera democracia.
“Un gobierno del pueblo para el pueblo. Un gobierno sin corrupción, que procure la justicia; un gobierno que sea ejemplo, para que con autoridad moral se tenga autoridad política, y México salga adelante”, sostuvo.
Y lo mismo será en el Congreso de la Unión, acotó. “No porque tengamos una mayoría actuaremos con acciones autoritarias. No vamos a actuar con prepotencia”, expuso.
“No por tener mayoría en el Congreso vamos a llevar a cabo reformas o cambios que polaricen. Vamos a gobernar con el mismo marco legal actual sin modificaciones mayores”.
Afirmó que enviará algunas iniciativas de reforma al Congreso, porque se debe acabar con la corrupción en el país.
Y las enmiendas que enviará tendrán que ver con esto. “Como, por ejemplo, la que pretendo mandar sobre el artículo 102 constitucional y que tiene que ver con que el Presidente de México en funciones pueda ser juzgado por delitos de corrupción y no sólo por actos como traición a la patria”, dijo.
También, abundó, “pretendo que se termine con privilegios. Igualmente que se castigue a quienes compran votos y a quienes utilizan el presupuesto para favorecer a partidos o a candidatos”, esto, con el fin de que se logre establecer una auténtica democracia.
Descartó que tenga en mente perpetuarse en el poder, dado que siempre se ha mostrado partidario del “sufragio efectivo y la no reelección”, y además adelantó que se someterá a la revocación del mandato.
“En tres años se les va a preguntar a los mexicanos si quieren que continúe yo como Presidente o que renuncie. Porque el pueblo pone y el pueblo quita”, reiteró, como ha expuesto en un sinnúmero de ocasiones a lo largo de la campaña electoral.
“Me voy a poner a prueba en la próxima elección intermedia, y esta consulta va a definir si termino el sexenio o renuncio”, aseveró.
REFORMAS Y AEROPUERTO
Tal como lo dijo desde el inicio de la contienda electoral de este año, Andrés Manuel López Obrador sigue siendo fiel a su propuesta de echar abajo la Reforma Educativa implementada en este sexenio que está por concluir.
“Lo he dicho y lo seguiré diciendo: voy a cancelar la Reforma Educativa. Pero la cosa no quedará sólo en echarla abajo, también vamos a presentar un plan nuevo, distinto y, sobre todo, que incluya el común acuerdo con todo el sector magisterial.
“Porque no se puede hacer una propuesta de este tipo sin el común acuerdo con todos los maestros. No se puede ofender a este sector. Porque no se puede aplicar una verdadera Reforma Educativa sin ellos. Además son ellos los que enseñan”, externó.
“Tenemos que tener un acuerdo con los maestros y con los padres de familia para mejorar en verdad la calidad de la enseñanza” en este país.
Y ya entrado en el tema de las reformas, habló de la Energética. “Revisaremos los contratos uno a uno”, señaló categóricamente.
“No queremos que sean contratos leoninos y que afecten el interés nacional; no queremos que haya corrupción. Y en caso de que haya anomalías, pues vamos a proceder legalmente, sin abusar, sin actuar con arbitrariedad y sin confiscar bienes. Todo debe ser por la vía legal”, remarcó.
Sobre el nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, insistió en analizar cuál es la mejor opción. “Vamos a analizar si se continuará construyendo el aeropuerto como hasta ahorita, en Texcoco, con presupuesto público, o bien, si mejor construimos otro de dos pistas en el Aeropuerto Militar de Santa Lucía. De hecho, esta opción podría significar mucho menos dinero que el de Texcoco”, explicó.
Pero también habló de una tercera opción que tiene que ver con la inversión absoluta del empresariado mexicano. Podría haber una concesión a empresarios mexicanos, “que ellos lo construyan y que no usen dinero del presupuesto, que hace falta para satisfacer otras necesidades” de la población.
ECONOMÍA Y SEGURIDAD
Sobre el crecimiento económico en México, dijo que de acuerdo con predicciones de especialistas se espera que el próximo año las naciones poderosas del mundo crezcan cerca de 4%. Pero en el caso de México, dijo, se espera que el crecimiento sea sólo de 2%.
Ante este panorama, acotó, “se requiere de la unidad de todos los mexicanos. Debemos unirnos todos para sacar a este país adelante. Ya no queremos bajos crecimientos. Queremos lo contrario, crecer como los otros países, para que haya empleo, para que haya paz y para que haya tranquilidad”.
Consideró que el crecimiento económico va intrínsecamente ligado al tema de la seguridad en el país, por lo que se tienen que reconocer las causas que provocaron la violencia en México.
Pormenorizó que para generar paz necesariamente “se tienen que atender las causas de la inseguridad y la violencia”. Y a la par, se debe tener una estrategia distinta a las empleadas, como por ejemplo, buscar que todas las dependencias e instituciones relacionadas con la seguridad actúen de manera conjunta. “Que haya profesionalismo, que haya perseverancia”.
De hecho, se compromete a levantarse muy temprano todos los días para que sea él quien personalmente reciba “el parte de la policía y del Ejército”.
“Todos los días voy a estar en Palacio Nacional atendiendo este asunto que tanto preocupa a todos los mexicanos”.
RENTA DE CASA
El virtual Presidente de México negó que él y su familia vayan a cambiarse para habitar la residencia oficial de Los Pinos. Precisó que seguirán en su vivienda, ubicada en Copilco, al sur de la Ciudad de México. Y es que la escuela de Julián, el más pequeño de sus tres hijos, queda muy cerca de donde viven.
“Una es rentar una casa cerca de Palacio Nacional, y la otra opción es ver si puedo irme, irnos a vivir a Palacio Nacional”, son las dos opciones que estamos viendo.
Acerca de la posibilidad de seguir manteniendo al Estado Mayor Presidencial como parte de la habitual protección del Presidente y su familia, negó que esto vaya a mantenerse igual.
Explicó que pasará a ser parte de la Secretaría de la Defensa Nacional, y mandó como mensaje a todos sus integrantes que no van a perder de ninguna forma su estatus o su rango. “No. Ellos van a ser respetados, pero ya no vamos a tener ese servicio. Vamos a cambiar”, finalizó.
Con información del Excelsior