Por: Iván Juárez Popoca Guerrero
ES MUY DIFÍCIL ENCONTRAR UN BUEN CYBER : En unos los empleados están con música “chafa” a todo volumen o la televisión, en otros las máquinas no tienen audífonos, otros abren y cierran cuando se les da la gana, máquinas que no funcionan, patrones que siempre están ocupando la mejor PC, caras largas….ufff! Este tipo de ejemplos son los que separan al tercer mundo de aquél en el que hacen lo mejor posible. Y este es sólo un ejemplo, muchas veces somos displicentes y faltos de interés en el servicio hacia los demás. Esto, aunque nos represente pérdidas económicas y de prestigio.
Me auto-observo y me doy cuenta de que yo también caigo en el “hay se va” en múltiples detalles que corresponden a mi actividad como maestro y mi participación en el teatro. Pienso que necesitamos buscar la crítica, practicar la auto-crítica y luchar por ser más eficientes. No es fácil: hay que estudiar más, cambiar patrones de conducta e inclusive hacer sacrificios económicos, pero “sí se puede”. Tan es así que existen miles de personas exitosas en nuestro país, a los cuales no solamente hay que admirar sino “emular.”
Ciertamente los políticos que hemos sufrido durante sexenios, el neo-liberalismo feroz, la falta de un verdadero Estado de Derecho y este tipo de situaciones sociales promueven la pobreza en la que vivimos la mayoría del pueblo y hay que luchar por cambios profundos que faciliten el trabajo digno y la justicia. Sin embargo, lo anterior debe estar acompañado por un cambio individual que vaya conformando una cultura de “hacer lo mejor posible con mis medios y capacidades.” Sí no vamos cambiando psicológicamente, de poco servirá cambiar de gobernantes y éstos acabarán repitiendo los errores del pasado. Ante un pueblo que no lee, que no estudia, que no quiere trabajar ni levantarse temprano, que únicamente se interesa por el foot-ball y por la pachanga y que solamente quiere ser servido y no servir, lo que aparece es la demagogia y la manipulación.
Me invito y te invito a ti, amable lector de “El Salmantino”, a que hagamos una especie de toma de conciencia, que nos veamos en el espejo y detectemos que detalle, que situación podemos cambiar (leer más, escuchar buena música, ordenar el cuarto, ser más amables, preparar la tarea, ser honesto, poner mayor atención en la actividad, etc.,) en beneficio de nosotros mismos y de la sociedad.