Entre los seis y ocho años de edad se capta mayor cantidad de calcio y nutrientes en los huesos.
La infancia temprana será la etapa que definirá la calidad de hueso que tendrá cada persona, aseguró el ortopedista con especialidad en cirugía articular de la Unidad Médico Quirúrgica del Hospital Juárez Centro, Agustín Parra González.
Informó que entre los seis y ocho años de edad se da la mayor captación de calcio y nutrientes en los huesos, en donde las horas de sueño juegan un papel importante para el óptimo desarrollo del sistema óseo.
También dijo que 30 minutos de actividad física al día fortalecen los huesos y los músculos, sin embargo, deportes que implican saltar estimulan en gran medida el crecimiento de cartílago, vital para el amortiguamiento y soporte del cuerpo.
Parra González señaló que las verduras verdes y los productos que provienen del mar, así como lácteos, son alimentos ricos en calcio que propician la fuerza y dureza del hueso. «Los ácidos grasos omega 3 reducen los procesos de inflamación, esto hace que el equilibrio dentro del hueso sea funcional».
Sostuvo que la vitamina “D” ayuda a absorber calcio en el cuerpo. Esta es sintetizada mediante rayos ultravioleta y distribuida por todo el organismo. «Lo recomendable es que los rayos del Sol lleguen a la piel entre las 12 y las 15 horas del día, durante 20 minutos».
El ortopedista con especialidad en cirugía articular subrayó que es importante controlar el peso corporal, ya que la obesidad altera el metabolismo del calcio, lo cual podría causar osteoporosis o lesiones óseas en la vida adulta.
Definió que la osteoporosis es la disminución de la densidad ósea, generalmente asociada con la pérdida de calcio. Es un padecimiento de género porque las mujeres son las más afectadas.
«Cuando la mujer deja de reglar ya no produce estrógenos, hormona que regula la entrada y salida de calcio al hueso. El hombre también puede padecer osteoporosis, pero es más tardía”, concluyó.
Finalmente, el doctor Agustín Parra recomendó llevar una dieta balanceada para que los nutrientes de los alimentos formen los grupos de enzimas que nuestro organismo necesita para evitar enfermedades y prevenir complicaciones relacionadas a otras afecciones.