Después que se detectó que el humo que salió de las alcantarillas el pasado domingo y que dejó con zozobra a la ciudadanía fue provocado por la quema de llantas tal como lo informó Candelario Cú Gutiérrez, titular de Protección Civil de Salamanca, se invitó a la población a evitar estas prácticas.
Protección Civil explicó que lo ocurrido pudo haber ocasionado una catástrofe pero afortunadamente se detectó a tiempo.
“Esto como lo encontramos pudo haber sido una fuente de ignición con una potencialidad de daño grave, pero afortunadamente se detectó a tiempo, se atacó a tiempo”.
Protección civil hizo un llamado a la población para evitar prácticas como la que se presentó el pasado domingo
Hace un par de días este medio realizó una transmisión en vivo luego de que ciudadanos de San Juan de la Presa reportaran la salida de un intenso humo desde las alcantarillas, a decir de la autoridad, durante una revisión se localizaron llantas incendiándose en el punto de descarga de las aguas pluviales al río Lerma.
“Haciendo el seguimiento de las posibles causas que se tienen, en relación al evento que tuvimos aproximadamente a las 19:30 horas, en donde por las tapas de los registros de los drenaje pluvial empezó a salir un humo muy denso que invadió momentáneamente la atmósfera de esta zona, y ya haciendo las revisiones encontramos que, en el punto de descarga de las aguas pluviales al río Lerma encontramos en su interior llantas encendidas aún”.
Cú Gutiérrez detalló que algún ciudadano debió entrar y con la quema provocó que el humo saliera por lo tubos de drenaje hasta salir por las alcantarillas.
En los próximos días estarán realizando un trabajo coordinado con el Comité Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Salamanca (CMAPAS), Protección Civil, Medio Ambiente y Fuerza Pública.
De acuerdo con Asociaciones Internacionales de Bomberos los gases de alcantarillas Compa Sulfuro de hidrógeno, Metano y Monóxido de carbono pueden ser muy peligrosos para la salud.
Los gases de la alcantarilla son una mezcla de gases tóxicos y no tóxicos. Los gases tóxicos incluyen sulfuro de hidrógeno, amoniaco, entre otros. Entran a tu casa a través de los desagües, goteras en las tuberías y rejillas de ventilación del alcantarillado obstruidas en el techo. La exposición a los gases de las alcantarillas es peligroso y puede comprometer la vida.
Sulfuro de hidrógeno (ácido sulfhídrico)
Los bajos niveles de hidrógeno causan síntomas similares a alergias en los seres humanos, tales como ardor en los ojos y tos. Los síntomas que son más graves incluyen nerviosismo, mareos, náuseas, dolores de cabeza y somnolencia. El sulfuro de hidrógeno huele mucho a huevos podridos. La exposición a niveles extremadamente altos de este gas puede causar pérdida del conocimiento y la muerte.
Se puede encontrar al interior de cámaras subterráneas, alcantarillas y muy especialmente en lugares de almacenamiento o procesamiento de pescados.
Este gas es más pesado que el aire, por lo que en subterráneos será de difícil ventilación.
Cuando se sospeche de su presencia y sea imprescindible ingresar, debe utilizarse equipos de respiración autónoma o mascarillas.
Metano
Aunque no es tóxico, la exposición a altos niveles de metano en lugares cerrados puede causar asfixia. El metano reduce la cantidad de oxígeno en el aire, causando dolor de cabeza, náuseas, mareos y pérdida del conocimiento. La muerte puede ocurrir rápidamente y sin aviso. El metano es también altamente inflamable; una acumulación de este gas se convierte en algo extremadamente explosivo.
Incendio y explosión
Tanto el metano y el sulfuro de hidrógeno son altamente inflamables. Una chispa o un punto de ignición en su presencia podría producir un incendio o una explosión si las concentraciones de ambos gases son lo suficientemente altas. A menudo, el gas del alcantarillado se filtra en la casa a través de los desagües en el sótano, que es donde normalmente se encuentran los hornos. Los hornos pueden proporcionar el punto de ignición.
Monóxido de carbono
El monóxido de carbono es un subproducto del metano. Es inodoro, insípido, no irritante y mortal. Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, cada año en los Estados Unidos, miles de personas se enferman después de la inhalación accidental de monóxido de carbono, y cerca de 450 de éstos mueren. Los que sobreviven suelen sufrir problemas neurológicos a largo plazo. Los síntomas pueden tomar la forma de migraña, depresión, gripe o fatiga crónica cuando son expuestos a niveles bajos sobre una base diaria. A medida que la exposición se hace más evidente, puedes experimentar confusión, convulsiones y pérdida del conocimiento. Puedes también experimentar alucinaciones o convertirse en algo demasiado emocional; incluso puedes ver fantasmas o experimentar sucesos sobrenaturales. La instalación de un detector de monóxido de carbono podría salvar tu vida.
Fosa séptica
Una fosa séptica ofrece su propia fuente de gases que son especialmente peligrosos para los niños y las mascotas. Los gases tóxicos atrapados dentro del tanque pueden escapar a través de la abertura situada en la planta baja. Un volumen mucho menor de gases puede hacerle daño a un niño o a una mascota con rapidez al inhalar el gas desde la apertura. Los tanques sépticos pueden acumularse en los espacios de vida, exponiendo a las familias a las bacterias, las infecciones virales y a los vapores tóxicos.
Consejos de seguridad
Añade agua regularmente a los accesorios de plomería que no utilizas con frecuencia para evitar la evaporación del agua en los sellos de alcantarillado. Un defectuoso permite que los gases de la alcantarilla entren en tu casa. No permitas que la grasa entre en el sistema de alcantarillado. La grasa se solidifica en las tuberías y en el sistema de alcantarillado, atrapando residuos. Con el tiempo, una acumulación de grasa puede obstruir el flujo del agua y causar que las aguas residuales se acumulen en tu hogar. No viertas productos químicos tales como anticongelantes, insecticidas, pesticidas, productos de limpieza, disolventes de pintura, fertilizantes o combustibles por el desagüe. Los productos químicos entran en el sistema de alcantarillado y viajan a la planta de tratamiento de agua, haciendo que sea difícil purificar el agua.
Prevención
Los accesorios de plomería defectuosos son una vía de entrada de los gases del drenaje en el hogar. Los sifones están diseñados para evitar un reflujo de gas desde la alcantarilla a la casa. Vierte el agua en los desagües para evitar que se sequen y no funcionen correctamente. Asegúrate de que los baños están funcionando correctamente. Inspecciona los respiraderos de plomería ubicados en el techo. Si estos orificios de ventilación están obstruidos con hojas, nidos o desechos, pueden causar que el gas de alcantarilla tenga una fuga en el hogar.
Fuente: cbs.cl