El día de la Candelaria se festeja exactamente 40 días después de Navidad es decir el 2 de febrero y es debido a que en ese día, la Virgen se purificó después del nacimiento del niño Dios y llevó candelas a la Iglesia para que estas fueran bendecidas.
Este era el festejo original, sin embargo, en la época del Virreinato llegó a México y el día de la Candelaria coincidió con la temporada de siembra que iniciaba el 2 de febrero y se festeja con ricos tamales como platillo principal y tradicional.
Esta se trata de una celebración propia de la religión cristiana, en concreto de la Iglesia católica, que se inicia en Occidente a partir del siglo Vl, y que engloba cuatro acontecimientos que se rememoran durante este día, la tradición en México indica que el día de Reyes Magos se debe partir la rosca y a quienes les salga el niño Dios tendrán que llevarlo a la iglesia a bendecirlo y posteriormente pagar cierto número de tamales estos mismos divididos entre el número de personas que obtuvieron este regalo.
Finalmente, esta fecha va de la mano con la rememoración del 6 de enero, fiesta de la Epifanía, la Epifanía significa su ocultamiento de aquellos que lo rechazan con violencia por su condición mesiánica; por ello, cuando se parte la rosca y uno o varios de los participantes encuentran en su porción la pequeña figura de un niño, representa tanto a Jesús cuando fue escondido en Egipto por sus padres para salvarlo de la persecución tramada por el rey Herodes, como al hecho de que sólo el que lo acepta como mesías puede hallarlo como lo recuerda el evangelista Mateo “Después de la partida de los magos, el Ángel del Señor se apareció en sueños a José y le dijo: «Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y permanece allí hasta que yo te avise, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo».