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BIÓSFERA/ El agua y la vida

Por: Manuel De la Torre Rivera * El fenómeno vida, tal como la conocemos en la Tierra, fue resultado de un complejísimo y lento proceso en la evolución del...

Por: Manuel De la Torre Rivera *

El fenómeno vida, tal como la conocemos en la Tierra, fue resultado de un complejísimo y lento proceso en la evolución del universo que llevó miles de millones de años, en el caso de nuestro planeta, alrededor de cuatro mil millones de años y apenas hace 200 millones de años aparecen los primeros mamíferos sobre la superficie terrestre, que es una especie a la que pertenecemos los humanos.  Los primeros humanoides que vagaron por este maravilloso suelo, lo hicieron hace sólo tres millones de años de los cuales solamente en los últimos diez mil años, tenemos constancia de que el hombre primitivo ya dominaba algunos cultivos como es el caso del maíz en Mesoamérica, cambiando su sistema nómada de vida por el sedentarismo que dio lugar a la formación de las primeras comunidades.

Sin embargo, poco nos detenemos a pensar que para hacer posible el fenómeno vida fue necesaria e imprescindible la existencia de agua en el planeta Tierra, ese raro compuesto en el cosmos que en este siglo XXI los astrónomos buscan afanosamente con poco éxito, en todos los cuerpos celestes que están al alcance de sus modernos instrumentos de prospección, incluyendo los planetas, satélites y asteroides de nuestro sistema solar, lo que nos permite concluir que: el agua es un elemento relativamente escaso en el extenso espacio cósmicoconocido.

Contrariamente a lo expresado en el párrafo anterior, en la Tierra, el agua es uno de los compuestos más abundantes en los océanos, si bien no toda esa agua puede ser utilizada directamentepara sostener las actividades productivas y el consumo humano, porque solamente el 2.5% de toda es agua dulce y la capacidaddepredadora que sobre la naturaleza ha ejercido el sistema capitalista dominante en la mayor parte de los países ha terminado por contaminar con desechos industriales, agrícolas y urbanos, a los ríos, lagos, lagunas y acuíferos, en tan sólo los últimos 200 años de vida del planeta. No ha habido en toda la historia del planeta y de la humanidad otro sistema que lo supere en capacidad de agotar sus recursos en tan poco tiempo y las consecuencias están a la vista con el calentamiento global, el cambio climático, y la pérdida de biodiversidad con la extinción de muchas especies, poniendo en riesgo la vida misma del planeta.

En los próximos dos números de Biósfera ampliaremos estos temas inicialmente aquí expuestos, que son de la autoría editorial de Alfonso Díaz Rey, en donde se profundiza en las causas estructurales del deterioro que experimentan los recursos de laTierra que han sido sobreexplotados, en su mayoría en beneficio de solo un puñado de capitalistas, que los convierte en losprincipales promotores de la injusticia social que priva en el planetay sin embargo, el editor lanza un rayo de esperanza en los párrafos que transcribimos a continuación:

La lucha por la defensa del medioambiente y de nuestro planeta, con estrechos vínculos con los esfuerzos por la preservación de la paz y la erradicación de la pobreza, adquiere en estos momentos la máxima importancia. La paz y la eliminación de la pobreza no se conseguirán en medio de la destrucción de nuestro hábitat y de nuestra especie junto con muchas otras que son afectadas.

La solución está en las manos de los pueblos y su unidad en torno a una lucha por la supervivencia, lucha que empieza por tomar conciencia de la necesidad de cambios drásticos en aspectos económicos, políticos y sociales en nuestros países, asociados con la recuperación de valores de una cultura de respeto hacia la naturaleza y hacia nosotros mismos; en esos aspectos tenemos mucho que aprender de nuestros pueblos originarios.

Si no somos capaces de lograr esos cambios, podríamos arribar a un momento en el que no habrá retorno alguno a condiciones anteriores y tendríamos que pagar las consecuencias de esa incapacidad.

El brevísimo plazo que como humanidad tenemos para evitar una extinción masiva de la mayor parte de la vida en el planeta nos plantea definir con claridad un objetivo estratégico, algo en lo que todos estemos de acuerdo y promueva la organización y la unidad de todas las luchas. Ese objetivo es: la vida. No será una lucha por la defensa de alguna forma de vivir, sino por la vida misma.

Salamanca; Gto. 07 de julio del 2023.

* Miembro del Observatorio Ambiental Ciudadano Biósfera, en Salamanca, Gto. y del Frente Regional Ciudadano en Defensa de la Soberanía.

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