Los churros de harina endulzados con azúcar o con diversos ingredientes son una tradición que puede disfrutarse todo el año.
Con más de 30 años de existencia Churros “El Chemo” es toda una tradición de buen sabor en el municipio y específicamente en el estacionamiento del mercado Barahona ubicado en la calle Rosario Castellanos en la colonia Guanajuato y desde siempre ha deleitado los paladares más exigentes.
Hace más de 30 años, cuando este negocio de churros nació, fue iniciado por su padre en las descanse don Luis Torres , convirtiéndose un poco más tarde en negocio familiar, atendido por varios integrantes de la familia, pero todos con la misma receta secreta que les da ese sabor característico a canela, con la medida exacta de azúcar.
El proceso de elaboración es muy sencillo desde comprimir la masa y pasarla por aceite y revolcarla en azúcar con canela el cual no tarda ni 15 minutos.
A pesar de los altibajos, «Chemo» como muchos lo conocen sigue adelante en su noble labor de no solo deleitar paladares exigentes, sino en ocasiones, calmando el hambre de personas que por falta de tiempo no hacen alguna comida, encontrando en este producto una buena opción a calmar el apetito que vienen sintiendo.
Los visitantes al mercado ubicado en la zona sur del municipio saben que en churros son una buena opción para calmar los antojos y todos los días los ubican en la esquina de la calle Rosario Castellanos entre Irapuato y 20 de noviembre.