Villagrán se encuentra en shock tras la denuncia pública realizada por Crisol Aguilar, fundadora de la asociación animalista «Las Patitas Aguilar». Aguilar, quien ha dedicado su vida al rescate de animales en situación de calle, ha interpuesto una denuncia formal contra Juan Rangel Montoya, un indigente de la región. Según los testimonios de Crisol, este hombre ha estado abusando y maltratando a perros callejeros por años, sometiéndolos a golpizas, abusos sexuales y, en algunos casos, quitándoles la vida de forma brutal.
La activista, que tiene bajo su cuidado a 160 perritos y 21 gatos, ha arriesgado su propia seguridad en diversas ocasiones al intentar rescatar a los animales que Juan maltrata en la vía pública. Según explicó, este hombre es extremadamente agresivo y suele estar bajo el influjo de drogas o alcohol, lo que agrava la situación.
Pese a que Aguilar ya había solicitado la intervención de las autoridades locales, cada vez que Juan es detenido, vuelve a ser puesto en libertad sin mayores consecuencias. No obstante, un reciente caso que involucra la muerte de un indefenso cachorro, presuntamente a manos de este sujeto, ha conmocionado a toda la comunidad, tanto en Villagran como en los municipios cercanos. Crisol tuvo que moverse a Cortazar durante más de un mes para que la denuncia fuera finalmente recibida por el Ministerio Público.
Vecinos y testigos señalan que los animales que Juan lleva consigo no solo provienen de la vía pública, sino que también se sospecha que los roba de hogares particulares, lo que ha generado gran indignación y temor entre los propietarios de mascotas.
Los reportes sobre los abusos cometidos por este hombre son desgarradores. Las personas han denunciado a través de «Las Patitas Aguilar» cómo han visto a Juan golpeando a perros, como en el caso de una perrita que sufrió un derrame ocular por la violencia recibida. Crisol y su equipo han salido a protestar enérgicamente, exigiendo justicia para los animales maltratados y recordando a aquellos que ya no pudieron sobrevivir a estos abusos.
En el último año, la asociación ha logrado rescatar a al menos 10 perritos de las garras de Juan Rangel Montoya. Aunque estos animales ahora se encuentran a salvo, las cicatrices del maltrato son profundas, tanto físicas como emocionales. El terror en sus ojos es un reflejo del sufrimiento que han padecido, y aunque ahora tienen una segunda oportunidad, las secuelas del abuso son imborrables.
Crisol Aguilar describe lo doloroso que es enfrentar a este individuo para arrebatarle a los animales. Aunque en algunas ocasiones ha contado con el apoyo de las fuerzas de seguridad, muchas veces ha tenido que actuar sola, armándose de valor frente al peligro.
La denuncia interpuesta en Cortazar, que se suma a una previa por amenazas directas hacia Crisol, acusa formalmente a Juan de maltrato animal y de haber asesinado a golpes a un cachorro, destrozándole el rostro hasta provocarle la muerte.
Crisol afirmó que no descansará hasta que se haga justicia, y expresó su temor no solo por los animales, sino también por la seguridad de las personas, debido a la agresividad del sujeto. Con firmeza, declaró que seguirá este caso «HASTA DONDE TOPE», y pidió a las autoridades que no sigan minimizando la importancia de proteger la vida de los animales, un reclamo que compartimos y apoyamos con vehemencia.
