La tarde de este jueves, Culiacán, Sinaloa, se convirtió en un escenario de caos y violencia tras la difusión de rumores sobre la presunta detención de Iván Archivaldo Guzmán, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán, uno de los narcotraficantes más buscados por la DEA. Según versiones no confirmadas, Guzmán, por quien se ofrece una recompensa de 10 millones de dólares, habría sido capturado, lo que desencadenó una serie de enfrentamientos y bloqueos en la ciudad.
Diversos puntos de Culiacán fueron escenario de actos violentos, incluyendo la quema de automóviles y la colocación de ponchallantas en varias vialidades estratégicas. Como resultado, múltiples calles fueron bloqueadas, lo que paralizó la movilidad en la ciudad y generó un ambiente de incertidumbre y temor entre los habitantes.
Además, se reportaron agresiones a agentes militares durante los enfrentamientos, lo que intensificó aún más la situación. Las autoridades, hasta el momento, no han confirmado la captura de Iván Archivaldo Guzmán, lo que ha contribuido a la confusión generalizada.
Ante el clima de terror que se vive en Culiacán, numerosos habitantes de la zona norte buscan desesperadamente regresar a sus hogares, organizándose en grupos y desplazándose a bordo de autos y camionetas para resguardarse de los narcobloqueos que marcan el nuevo «Culiacanazo».
La situación sigue en desarrollo, y la población se mantiene en alerta ante posibles nuevas confrontaciones.