El Papa Francisco falleció esta mañana del lunes 21 de abril a los 88 años, tras enfrentar diversas complicaciones de salud en los últimos meses. El deceso fue confirmado por el cardenal Kevin Farrell, quien informó a través de un comunicado oficial: “Esta mañana a las 07:35 horas, el obispo de Roma, Francisco, volvió a la casa del Padre”.
Jorge Mario Bergoglio, originario de Argentina y el primer Papa latinoamericano, había mostrado señales de deterioro físico en el último año. A pesar de una bronquitis diagnosticada en febrero, y múltiples problemas respiratorios previos, el Pontífice logró participar recientemente en las celebraciones de Semana Santa, incluyendo la tradicional bendición Urbi et Orbi desde la Basílica de San Pedro.
Su estado de salud había sido frágil desde hace tiempo: en diciembre de 2024 sufrió un resfriado que le impidió asistir al rezo del Ángelus, y en 2023 estuvo internado tres días en un hospital de Roma. También tuvo caídas en su residencia, una de las cuales le dejó un hematoma visible en el rostro tras golpearse con una mesa.
Con su muerte, el Vaticano ha activado el protocolo tradicional que se sigue cuando un Papa fallece en funciones. Este incluye la verificación formal del deceso mediante tres llamados simbólicos en su frente con un pequeño martillo de plata. Posteriormente, se destruye su anillo papal para evitar falsificaciones y se inicia un período de nueve días de ceremonias fúnebres conocidas como exequias.
El cuerpo del Pontífice será preparado por especialistas y colocado en un ataúd de tres capas —ciprés, plomo y nogal— con una Biblia abierta y un crucifijo encima. No se permitirán fotografías del cuerpo ni en su lecho de muerte ni durante la exposición. Además, el Camarlengo cerrará su estudio y habitación, que no serán reabiertos hasta que se elija al nuevo Papa.
Mientras se da inicio a este proceso, ya comienzan a surgir los nombres de los posibles sucesores. Un informe publicado en diciembre de 2024 por el periodista Edward Pentin, con el respaldo del Sophia Institute Press y la revista Cardinalis Magazin, identificó a 22 cardenales con potencial para ser electos en el próximo Cónclave.
De estos, hay 12 que se perfilan como los más fuertes candidatos para liderar la Iglesia Católica:
•Angelo Bagnasco
•Matteo Zuppi
•Robert Sarah
•Luis Tagle
•Malcolm Ranjith
•Pietro Parolin
•Pierbattista Pizzaballa
•Péter Erdő
•Willem Eijk
•Anders Arborelius
•Charles Bo
•Jean-Marc Aveline
El informe analiza no solo sus trayectorias, sino también sus posturas ante temas que dividen a la Iglesia y la sociedad moderna, como el cambio climático, la ordenación de mujeres como diaconisas, la bendición de parejas del mismo sexo y el acceso a la comunión de personas divorciadas y vueltas a casar.
En los próximos días, la atención mundial se centrará en el Vaticano, donde, además del funeral de Estado del Papa Francisco, se iniciará el proceso que conducirá a la elección del nuevo líder espiritual de más de 1,300 millones de católicos en todo el mundo.