Para mantener los niveles de ocupación de habitaciones y no perder a turistas, hoteles de la Riviera Maya trasladan temporalmente a sus huéspedes a playas de establecimientos pertenecientes a las mismas cadenas, o en colaboración con otras, que no se encuentran contaminadas con sargazo, mientras se limpian las playas de donde se hospedan.

En un comunicado, el presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio Servicios y Turismo, José Manuel López Campos, dijo que los empresarios del sector en la Riviera Maya son conscientes del malestar que la propagación del sargazo causa a los vacacionistas. Por esa razón llevan a cabo acciones para compensar está molestia como ofrecer descuentos en tarifas, que van del 15 al 25 por ciento, a fin de mantener su ocupación al mismo nivel que el año pasado, que fue de 80 por ciento en la temporada de verano de 2018.

“Por otra parte, las grandes cadenas incrementaron sus servicios a sitios no relacionados con las playas, como a zonas arqueológicas, ciudades coloniales y centros ecológicos recreativos, con el objeto de ofrecer más opciones de paseo a los visitantes”, subrayó el dirigente empresarial.