No es la primera vez que la Calle Juárez presenta deterioro y sale a relucir la mala calidad y el cero empeño que se puso en dicha obra; pues esta vialidad, ha sido reparada por lo menos 05 ocasiones y ninguna ha bastado para que quede en óptimas condiciones de uso.

La primera etapa, rehabilitada a principios del 2017, requirió de una primera inversión de 10 millones de pesos, durante la administración de Antonio Arredondo, ya que la calle presentaba desprendimientos del porfido desde el tramo de Zaragoza a Tomasa Esteves.

Aunque la contraloría de la pasada administración impuso una sanción a la constructora de la obra por la cantidad de 30 mil pesos, esto no fue garantía para solventar las averías, pues aún en plena nueva administración, la calle se esta volviendo a resquebrajar, en las mismas partes, que ya habían sido reparadas.

Aunque la ciudadanía y más, el gobierno municipal están concientes de que el material que se utilizó para la obra no es el adecuado, no se ha podido realizar algún cambio, pues al no haber recurso para la obra pública salmantina, los estragos, se han tenido que solventar con lo que hay: bacheando la calle para evitar percances.

No solo es la mala calidad de la calle, ni la mala vista que da; sino que el cierre continuo que sufrió esta vialidad, generó perdidas a los comerciantes aledaños, por lo que han tomado la postura, de no permitir que se vuelva a cerrar, pues están seguros, que de todos modos, la calle no va a quedar al 100%.