Tener una televisión en el dormitorio es algo cada vez más frecuente. Y al mismo ritmo que aumentan los hogares con el televisor en el dormitorio aumentan los trastornos del sueño. No queremos demonizar el televisor, porque está claro que no es la única causa de insomnio, pero sí queremos desterrar este aparato del dormitorio. Por mucha costumbre que haya de quedarse dormido viendo la tele, la verdad es que estamos ante uno de los peores enemigos del sueño.
La televisión en el dormitorio
Hay mucha gente que se mete en la cama, enciende el televisor y, aunque no le guste la programación, se queda viendo la tele con la esperanza de quedarse dormida. Y mucha gente se duerme con la televisión encendida, desde luego, pero la calidad del sueño no es la más recomendable para levantarse descansada. El sonido de fondo y la iluminación de la pantalla del televisor afectan a la calidad del sueño y, por lo tanto, a nuestro descanso.
No nos gusta meternos en la intimidad de los hogares, pero sabemos de muchas parejas cuyos problemas empiezan porque uno de los dos no puede conciliar el sueño sin la televisión puesta, mientras que el otro necesita silencio y oscuridad para dormirse. Debemos dar la razón a quienes necesitan un entorno oscuro y libre de ruidos para dormir bien porque es uno de los principios de una buena higiene del sueño.
Todas aquellas personas que padecen insomnio que tienen problemas para dormir bien, que se despiertan varias veces o que duermen pocas horas, necesitan un dormitorio libre de estímulos. Y la televisión, es sin duda, un gran estímulo para no dormir. El dormitorio ideal para conciliar el sueño debe ser un lugar que incite al descanso y no al ocio, ámbito al que pertenece el televisor.
Televisión para no dormir
Al igual que ocurre con el resto de la tecnología, con los ordenadores o con el teléfono móvil, hay que olvidarse de la televisión una hora antes de ir a dormir. Esto es algo difícil de asimilar porque estamos acostumbrados a cenar y ponernos a ver la tele hasta la hora de ir a la cama. Sin embargo, la televisión, sus imágenes, su iluminación y su sonido son estimulantes y, al final, lo que queremos conseguir es llegar a la cama lo más relajadas posible.
Especial cuidado con la televisión deben tener niños y adolescentes que acostumbran a pasar demasiadas horas frente a ella. Y es que son muchos los estudios que alertan del aumento de casos de insomnio en personas cada vez más jóvenes. ¿La causa? El uso excesivo del televisor.
Si bien ver la tele supone un momento de ocio sin complicaciones que incluso puede hacernos olvidar todas esas preocupaciones que no nos dejan dormir, lo que no podemos hacer es tenerla como compañera de cama. Para dormir bien, mucho mejor será apagar el televisor y darnos un baño relajante que nos predisponga al descanso.
Fuente: .diariofemenino.com