El actual técnico de los Bravos de Juárez, Ricardo Ferretti, dejó claro que él nunca quiso salir de Tigres y que su despido lo tomó por sorpresa. Dejó claro que no le deben ni le debe nada nadie, pero no ocultó el deseo que tenía por mantenerse por más años en el banquillo del equipo de San Nicolás.
“Yo pensé que iba a seguir, pero la situación tomó otro rumbo. Después de tantos años, tenemos que aceptar las decisiones. Creo que el hecho de hacerme a un lado es para que sean mejores. El puesto de entrenador así es, llega a un punto en el que se termina. A mi me toco querer quedarme, pero me tuve que ir”, dijo.
Ya enfundado en la chamarra del equipo fronterizo, Ferretti sabe que tiene un verdadero reto. Aunque se planteó una meta de 26 puntos, se dijo consciente de que su principal batalla será por evitar volver a pagar alguna multa por quedar hasta abajo en el tema del cociente, como ya les pasó en el Guard1anes 2021.
“Encuentro una problemática grande. Un equipo que ya invirtió mucho dinero y que no es nada agradable la situación en la que se encuentra. Pusimos metas y objetivos por lograr, pero en primer lugar debemos buscar nuestros refuerzos para cumplir con lo que nos piden. Debemos alejarnos de la situación del cociente”, comentó.
El “Tuca” también se mostró agradecido por los años ininterrumpidos que tiene en los banquillos. Admitió que sin la confianza que pusieron en él todas sus directivas, sumado al respaldo de los jugadores, hoy no tendría nada que celebrar.
“Número uno, es realmente querer tu trabajo, disfrutarlo y trabajar al máximo. Para mí, hacer las cosas al 100 por ciento es lo que más me gusta. El futbol es uno de los más bonitos que hay. Me siento muy agradecido por estar dentro todo este tiempo. Lo demás llega con el apoyo de la directiva y el resultado de los jugadores”, finalizó